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El expresidente Donald Trump ha pedido el voto ante unos 20.000 simpatizantes, que llenaron el Madison Square Garden de Nueva York escucharle su consigna de "hacer Ámérica grande otra vez". El republicano ha prometido una nueva economía, basada en eliminar impuestos, poner fin a la “invasión migrante” y un mayor proteccionismo económico frente a China. Además de despedir -simbólicamente- a su rival, Kamala Harris.
"No vamos a aguantarte más ¡Vete ya, Kamala!¡Estás despedida!”, ha gritado Trump desde el escenario del icónico anfiteatro en el centro de Nueva York, repleto de simpatizantes que comenzaron a llegar más de siete horas antes del inicio del evento.
El empresario dijo que la vicepresidenta Harris, su rival demócrata en las elecciones del próximo 5 de noviembre, “ha perpetrado la más escandalosa traición contra nuestro pueblo”, entre otras cosas, por “desplegar un Ejército de inmigrantes que está llevando a cabo una campaña de violencia y terror contra nuestros ciudadanos”.
Trump reiteró que invocará una ley marcial, que se utilizó por última vez durante la II Guerra Mundial, para deportar inmigrantes de forma masiva, porque el país está siendo “ocupado”.
El magnate, junto a su esposa, Melania Trump, y su mayor patrocinador, el multimillonario Elon Musk, ha asegurado que su plan económico incluirá deducciones fiscales para personas que cuidan de familiares con necesidades especiales.
Además, reiteró que dejará de gravar las propinas, el pago de las horas extras y los beneficios de seguridad social de los pensionistas, unas propuestas que están enfocadas en grupos de votantes esenciales para que Trump pueda ganar las elecciones e imponerse en los siete estados pendulares de estas elecciones: Pensilvania, Georgia, Carolina del Norte, Nevada, Arizona, Wisconsin y Míchigan.
El discurso neoyorquino de Trump estuvo lleno de promesas: el expresidente ha asegurado que en un año bajará el coste de la gasolina en la mitad y acabará con el programa de reducción de emisiones conocido como ´Green New Deal´, que llamó “la gran estafa verde”.
“Vamos a acabar con la inflación rápidamente y vamos simplemente a hacer Estados Unidos asequible de nuevo”, aseguró Trump.
En cuanto al comercio prometió mayor proteccionismo y una ley que llamó “ley de comercio recíproco”, por la que pondrá nuevos aranceles contra China u otros países si ellos gravan sus importaciones desde Estados Unidos.
Trump repasó las líneas que estado usando estos meses en sus mítines de campaña como que si él no toma el poder el mundo se arriesga a que pase una “III Guerra Mundial” o los enemigos de EE.UU. se ríen del país.
El empresario se burló del presidente, Joe Biden, por pasarse su mandato “dormido” y no haber manejado bien el conflicto en Ucrania, la retirada de Afganistán ante la toma de poder de los talibanes o la respuesta ante los últimos huracanes que han golpeado el país.
La campaña de Trump ha organizado este evento de campaña en una ciudad de gran mayoría demócrata y en un estado que todas las encuestas dan a Harris.
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