'Hackers' iraníes enviaron información este verano que robaron de la campaña presidencial de Donald Trump a personal vinculado a la campaña de Joe Biden , según han informado en un comunicado conjunto la Oficina de Inteligencia Nacional, el FBI y la Agencia de Seguridad Cibernética.
El documento aclara que "no hay información que indique que los destinatarios respondieron. Además, los ciberdelincuentes iraníes han continuado sus esfuerzos desde junio para enviar material robado y confidencial asociado a la campaña de Trump a organizaciones de medios estadounidenses".
Los servicios de Inteligencia estadounidense han subrayado que "esta actividad cibernética maliciosa es el último ejemplo de la estrategia múltiple de Irán", como ha señalado en ocasiones anteriores, que tiene entre sus objetivo "estimular la discordia y socavar la confianza" en el proceso electoral en las que Trump y la 'número dos' de Biden, Kamala Harris aspiran a la presidencia del país.
"Como líder de la respuesta a las amenazas, el FBI ha estado rastreando esta actividad, ha estado en contacto con los afectados y continuará investigando y reuniendo información para perseguir y desbaratar a los actores responsables de amenazas", ha aseverado. Asimismo, ha subrayado que los actores extranjeros China "están aumentando sus actividades de influencia electoral" a medida que se acerca la fecha de los comicios.
El FBI ha señalado que "en particular, Rusia, Irán y China están tratando de alguna manera de exacerbar las divisiones en la sociedad estadounidense para su propio beneficio y ven los períodos electorales como momentos de vulnerabilidad". "Los esfuerzos de estos u otros actores extranjeros para socavar nuestras instituciones democráticas son una amenaza directa para EEUU y no serán tolerados", ha concluido.
La Inteligencia estadounidense, a mediados de agosto, concluyó que el Gobierno de Irán estuvo detrás del ciberataque contra la campaña de Trump, señalando que Teherán intentó 'hackear' también la campaña del Partido Demócrata, entonces liderada por Biden.
Las agencias atribuyeron a Irán actividades para "comprometer" la campaña de Trump e intentos "mediante ingeniería social y otros esfuerzos" para acceder a personas con acceso directo a las campañas presidenciales de ambos partidos políticos".
Trump ha tratado de sacar tajada tras hacerse pública esta información de los servicios de Inteligencia. Sin muchos rodeos atacó a Biden, acusándolo de estar en connivencia con Irán para ganar las elecciones anteriores, sobre las que ha insistido que fue "robada".
“Acaban de publicar un informe que confirma que actores iraníes hackearon las cuentas de correo electrónico de la campaña de Trump y, a su vez, intentaron entregar los materiales hackeados a la campaña de Biden-Harris. Les dieron todos los materiales porque Biden está trabajando con Irán e Irán no me quiere exactamente porque estaban listos para hacer un trato, excepto que tuvimos una elección que fue manipulada y robada”, dijo Trump, al hacer nuevamente afirmaciones falsas sobre las elecciones presidenciales de 2020.
El portavoz de la campaña de Kamala Harris ha garantizado su apoyo a la investigación y "hacer cumplir la ley". “Hemos cooperado con las autoridades competentes encargadas de hacer cumplir la ley desde que nos enteramos de que personas asociadas con la entonces campaña de Biden se encontraban entre las víctimas previstas de esta operación de influencia extranjera”, dijo Morgan Finkelstein.
“No tenemos conocimiento de que se haya enviado ningún material directamente a la campaña; algunas personas fueron atacadas en sus correos electrónicos personales con lo que parecía un intento de spam o phishing. Condenamos en los términos más enérgicos cualquier intento de actores extranjeros de interferir en las elecciones estadounidenses, incluida esta actividad maliciosa no deseada e inaceptable”.
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