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Esbozando una ancha sonrisa, Giorgia Meloni, primera ministra italiana, se ha erigido como protagonista en la 50ª Cumbre del G7 celebrada desde este jueves y hasta el próximo sábado en la región de Apulia, al sur de Italia. En el encuentro de altos cargos no es solo la única jefa de Gobierno presente, sino también la única entre todos esos líderes de las democracias liberales que no atraviesa horas bajas por unos motivos u otros.
En la que se considera una gran oportunidad para que deje su rúbrica en la política mundial, Meloni ha protagonizado también la fotografía del día con un espontáneo selfi que se ha producido mientras esperaba a Joe Biden, presidente Estados Unidos, durante más de 20 minutos.
En la instantánea, la mandataria italiana se realizaba la fotografía con toda una marea de periodistas de fondo justo antes de la llegada del norteamericano.
En la esperada cumbre, que tiene como escenario el 'resort' Borgo Egnazia, Meloni recibe como anfitriona a los líderes de los países más poderosos, pero en varios casos en una posición más débil que la suya, tras haber salido reforzada en los comicios europeos.
No obstante, para empezar le ha tocado una prueba de paciencia: Joe Biden, en efecto, le ha hecho esperar de pie más de 20 minutos, pero la primera ministra italiana ha aprovechado para ganarse a una parte de la prensa con su selfi.
Con el presidente de los Estados Unidos ya en la mesa, Meloni ha enumerado los objetivos de la cumbre, destacando su visión de uno en particular: "Es el tema de la migración y el papel cada vez más preocupante que están asumiendo las organizaciones de tráfico de personas, explotando claramente la desesperación de los seres humanos", ha señalado.
En la agenda de hoy están las guerras en Gaza y Ucrania, con Volodímir Zelenski como invitado.
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