La Policía de Chicago mata con 96 disparos a un conductor al que detuvo por no llevar el cinturón de seguridad

  • La familia ha reclamado una investigación por la muerte de Dexter Reed, un joven negro de 26 años, que murió en el hospital tras recibir 96 disparos

  • Las cámaras de los cinco agentes grabaron la actuación tras detener al joven negro de 26 años, que murió acribillado

  • Los agentes le vaciaron varios cargadores, después de que el fallecido, presuntamente, disparase a uno de los agentes, que le dio el alto

Nueva polémica intervención policial en Chicago, Estados Unidos: Un conductor ha muerto tras recibir 96 disparos tras ser detenido por no llevar el cinturón de seguridad puesto. Los videos de las cámaras corporales han grabado todo lo que ocurrió con Dexter Reed, un joven negro de 26 años. Sus familiares han condenado la intervención policial.

El conductor fallecido, identificado como Dexter Reed conducía un SUV blanco cuando fue detenido por oficiales que vestían de paisano, supuestamente, porque el joven no tenía puesto el cinturón de seguridad, mientras conducía el 21 de marzo por 3800 de West Ferdinand Street, en la ciudad de Chicago, según ha informado la cadena CBSNews.

Una agente se acerca al vehículo y Reed se niega a abrir la puerta, mientras sube la ventanilla tintada. Después se escucha que dispara desde el interior del coche. En las imágenes grabadas por los agentes se les ve correr a cubrirse, mientras se escucha el tiroteo. Uno de los policías es herido, mientras Dexter Reed finalmente sale del vehículo y cae sobre el asfalto.

Los agentes le vaciaron varios cargadores, después de que el fallecido, presuntamente, disparase a uno de los agentes, que le dio el alto. Se ve cómo ya moribundo en el suelo le ponen las esposas. Fallece poco después en el hospital, adonde fue trasladado. Ahora la investigación analiza vídeos como los que van a ver, para esclarecer lo ocurrido

La policía disparó 96 balas contra el conductor en menos de un minuto. Tras hacerse pública las imágenes, los familiares y vecinos han exigido que se investigue lo que consideran un asesinato y condenan un uso desmedido de la fuerza policial.  

“Como agencia establecida sobre el principio básico de la reforma, tomamos muy en serio las investigaciones sobre el exceso en la actuación policial y las circunstancias circundantes", ha informado el Departamento de Responsabilidad Policial (COPA, por sus siglas en inglés).

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