El colapso del puente de Baltimore ha puesto de relieve el gigantismo de estos barcos contenedores y su enorme impacto en el transporte marítimo. Las autoridades trabajan sobre el carguero para retirar las toneladas de acero y poder reabrir el paso, según informa Noelia Tobías..
Esa es la gran grúa en la que han depositado toda su confianza las autoridades de Baltimore. Con ella pretenden remover los enormes fragmentos de acero que cayeron del puente. La idea es abrir un canal de unos 350 metros para poder reanudar el trafico fluvial lo antes posible.
"La economía de Maryland, decía el gobernador, y de todo el país depende de ello. Especialmente para el gran motor que es la industria de la automoción. Sólo el año pasado Baltimore fue puerto de desplazamiento de 850.000 vehículos.
Después, el ambicioso plan de limpieza contempla la retirada de las más de 4.000 toneladas de acero acumuladas sobre el carguero siniestrado. Desde sus entrañas, los investigadores han examinado los daños de la proa, con atención especial a los 56 depósitos con materiales peligrosos que transportaba el buque. Y a modo de precaución ya se ha desplegado un barrera de contención más de 700 metros.
Y mientras ellos siguen indagando en las causas del accidente, desde Honduras, la familia de uno de los cuatro trabajadores que siguen desaparecidos lamenta que se hayan suspendido las tareas de búsqueda. Ansían darle sepultura cuanto antes.