La autoría del atentado perpetrado en una sala de conciertos de Moscú donde mataron a más de 140 personas ya ha sido atribuida por ellos mismo al ISIS, pero desde Rusia siguen buscando relacionar de alguna manera el ataque con Ucrania.
En esta ocasión ha sido el presidente de Bielorrusia, Alexander Lukashenko, quien ha desmentido la versión de Rusia asegurado este martes que los cuatro hombres armados que abrieron fuego el pasado viernes contra la sala de conciertos Crocus City Hall intentaron huir a Ucrania, después de comprobar que no era posible cruzar a territorio bielorruso.
Lukashenko ha contado que se establecieron medidas de seguridad a lo largo de la frontera poco después del inicio de estos atentados. "No pudieron entrar en Bielorrusia. Lo vieron, entonces dieron media vuelta y se dirigieron al tramo de la frontera entre Ucrania", ha dicho, recoge la agencia estatal de noticias Belta.
"La interacción entre bielorrusos y rusos vale mucho", ha destacado Lukashenko para comentar cómo los servicios de seguridad de Minsk y Moscú colaboraron en todo momento tras conocerse que los cuatro asaltantes habían huido.
Tras unos días apuntando hacia Ucrania y pese a que Estado Islámico se apresuró a reivindicar estos ataques, el presidente ruso, Vladimir Putin, afirmó el lunes que fueron obra de islamistas radicales, pero sin cerrar definitivamente la puerta a una supuesta relación de Kiev.
El secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Nikolai Patrushev, ha asegurado este martes que Ucrania está involucrada en el atentado del pasado viernes.
Interrogado por la prensa sobre si el responsable del atentado es Ucrania o Estado Islámico, el 'número tres' del Consejo de Seguridad ha respondido con un contundente: "Ucrania, por supuesto", según recoge la agencia rusa de noticias TASS.
Suscríbete a las newsletters de Informativos Telecinco y te contamos las noticias en tu mail.
Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y conoce toda la actualidad al momento.