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Pretendían acallar rumores y mostrar una imagen feliz por el ‘Día de la Madre’, pero lo que han desatado en la familia real británica es una auténtica tormenta con toda la atención mediática centrando los focos en la princesa de Gales. Kate Middleton y su imagen manipulada, --como ella misma confesaría--, lejos de calmar la preocupación en torno a ella desde que en enero se sometiese a una cirugía abdominal, han aumentado las especulaciones y han sembrado todavía más dudas a su alrededor.
Publicada directamente desde su perfil oficial, la instantánea más comentada de la semana, en la que aparece junto a sus hijos, --el príncipe Jorge, la princesa Carlota y el príncipe Luis--, pronto se convertiría en objeto de una tromba de reacciones por los evidentes errores de edición contenidos en ella.
Analizada por múltiples expertos que han visto en la imagen más de una decena de fallos de retoque digital, al que muchos se refieren como un “mal trabajo”, ejecutado ‘rápidamente’ y de forma burda, la primera alerta la pusieron distintas agencias internacionales que, en un hecho también muy comentado, eliminaron la fotografía de su catálogo precisamente por haber detectado los signos de su manipulación.
La situación y el revuelo originado fue tal que la propia Kate Middleton se pronunciaba, a través de la misma red social desde la que se publicaron las imágenes, pidiendo disculpas: ''Como otros muchos fotógrafos aficionados, ocasionalmente experimento con la edición. Quiero expresar mis disculpas por cualquier confusión que haya causado la fotografía familiar que compartimos ayer", expresó desde la cuenta oficial de los príncipes de Gales.
Su confesión, no obstante, no ha servido para que la sociedad británica haya dejado de hacerse preguntas. Algunos creen que desde la familia real deberían contar abiertamente qué es lo que está pasando, abandonando el hermetismo para explicar de una vez qué le sucede a la princesa y cuál es su estado de salud. Otros, en cambio, defienden su derecho a la intimidad y hablan incluso de una ‘campaña de bullying’ contra ella.
Mientras, sobre la fotografía se llega a decir que puede tratarse de una superposición de imágenes, que puede ser falsa y tomada en otro momento, mientras sus metadatos, analizados ya desde distintas fuentes y por distintos expertos, confirman que fueron sacadas con una cámara de lente Canon y editadas en el famoso programa Adobe Photosop.
La pregunta que sigue desatando los rumores no deja de extenderse: ¿Por qué los retoques? Son muchos los que no entienden la necesidad de hacerlo, lo que dispara las especulaciones.
Según “fuentes cercanas a los duques de Sussex” citadas por Page Six, el príncipe Harry y Meghan Markle “nunca” cometerían ese error. Aseguran que tienen “un buen ojo” y una “extraordinaria atención” para los detalles.
Además, estas fuentes apuntan a que, si ellos hubiesen hecho lo mismo, “habrían sido aniquilados”, asegurando que no se siguen “las mismas reglas” para ambas parejas.
En este escenario y frente a todos los rumores y especulaciones, la familia real británica intenta dar una imagen de normalidad; de que está centrada en su trabajo.
Precisamente ayer, vimos a la reina Camila presidir una recepción en el Palacio de Buckingham y mañana, jueves, veremos al príncipe Guillermo en el Museo de la Ciencia de Londres para celebrar el 25 aniversario del premio que lleva el nombre de su madre.
Entre tanto, y frente a ello, lo que preocupa ya no son solo los retoques de Kate Middleton, sino la negativa a que se conozca la foto original.
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