Dos policías y un bombero han muerto tiroteados el domingo durante una intervención en un incidente doméstico en la ciudad estadounidense de Burnsville (Minnesota). El asesino, también fallecido, aún no han sido identificado.
Según un comunicado del ayuntamiento de la ciudad, el incidente tuvo lugar sobre la 1.50 hora local, cuando las autoridades recibieron una llamada de emergencia informando de un hombre "armado y atrincherado" dentro de una vivienda, en cuyo interior también se encontraban varios miembros de la misma familia.
Cuando la Policía llegó al lugar, la situación degeneró en un tiroteo y otro agente resultó herido y fue hospitalizado con heridas que no ponían en peligro su vida.
A las 8 de la mañana, hora local, se declaró muerto al autor del tiroteo y las personas atrapadas en la casa salieron ilesas. Las autoridades confirmaron que ya no existía amenaza para la seguridad pública.
Los agentes asesinados fueron identificados como Paul Elmstrand y Matthew Ruge, y el bombero, que también ejercía de paramédico, como Adam Finseth. El agente herido fue identificado como el sargento Adam Medlicott.
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