Comunicado de última hora de Kensington Palace. "La princesa de Gales ha vuelto a su casa de Windsor para continuar con la recuperación de su operación", reza el texto difundido por Casa Real. Con él, después de dos largas semanas de silencio sobre el estado de salud de Kate Middleton, el gabinete de comunicación no solo confirma que la futura reina de Inglaterra ha cumplido con el plazo previsto para recibir el alta médica tras ser intervenida del abdomen (catorce días como máximo). También transmite un mensaje de tranquilidad al asegurar que "su evolución es favorable".
Recordemos que la falta de información sobre su estado había derivado en inquietud y preocupación. El mutismo en torno a cuál era la situación real de la esposa del príncipe Guillermo era tal que ni siquiera los tabloides publicaban datos al respecto. Ahora, gracias a este comunicado, se constata que Middleton se encuentra estable, aunque se siga sin conocer con exactitud cuál ha sido el problema que la tendrá alejada del foco público hasta después de Semana Santa.
A pesar de la fuerte expectación mediática y de la presencia de periodistas gráficas a las puertas del hospital, ha sido imposible captar a Kate Middleton abandonando el centro.
"El príncipe y la princesa quieren dar las gracias a todo el equipo de la London Clinic, especialmente al equipo de enfermeros, por su dedicación y sus cuidados", expresan en esta nota difundida a los medios. Los padres de Kate, sus hermanos James y Pippa y el propio Guillermo, que ha despejado su agenda oficial para poder centrar su tiempo y esfuerzos en su mujer y sus tres hijos, han podido conocer de primera mano la evolución de la princesa, a la que han visitado a diario.
Lo mismo el rey Carlos III, que en este mismo impass de tiempo también ha sido paciente de la London Clinic, en su caso por una operación de próstata, (una hipertrogia "benigna", concretamente) de la que salió con éxito.
A lo largo de estos intensos catorce días, la familia real británica ha podido palpar la implicación del pueblo inglés (y de medio planeta) con su futura reina. Los mensajes de ánimo eran una constante en redes sociales. De ahí que también hayan querido agradecer todos esos "buenos deseos que ha recibido desde todas las partes del mundo".