Este domingo, dos buques que navegaban por el mar Rojo fueron atacados con misiles y drones por los rebeldes hutíes de Yemen, apoyados por Irán. Los hutíes afirmaron que se trataba de barcos israelíes: el Unity Explorer, con bandera de Bahamas, y el Number 9, con bandera de Panamá. Anteriormente, el Pentágono confirmó que el destructor estadounidense USS Carney también fue blanco de un ataque hutí el pasado domingo.
El portavoz de las fuerzas armadas hutíes, Yahya Sarea, declaró en una transmisión televisiva que la operación fue en apoyo al pueblo palestino, que sufre la invasión de Gaza por parte de Israel.
Sarea dijo que el Unity Explorer fue impactado por un misil naval y el Number 9 por un dron naval, y advirtió que seguirán atacando cualquier buque israelí o vinculado a ellos en el mar Rojo y el mar Arábigo, considerándolos como “objetivo militar”. Sin embargo, no dio detalles sobre el estado de las embarcaciones.
El Unity Explorer, operado por una empresa británica relacionada con el empresario israelí Rami Ungar, según el periódico ‘Haaretz’, iba del Canal de Suez a Singapur. El Number 9, de la compañía singapurense Pacific International Lines Pte Ltd, hacía el trayecto contrario.
Según un comunicado de Al Arabiya, el USS Carney, que se encontraba en el sur del mar Rojo, interceptó primero un avión no tripulado hutí que se dirigía hacia él. Luego, detectó un misil balístico que apuntaba al Unity Explorer.
La Operaciones Marítimas Comerciales (UKMTO), una entidad de la Marina del Reino Unido, informó de un ataque con dron cerca de la zona e instó a los buques a tomar precauciones. Antes, la UKMTO había reportado actividad de drones y una posible explosión desde Yemen, y una entidad que se identificó como autoridad yemení ordenó a un buque desviar su ruta.
Los hutíes han lanzado varios ataques con misiles y drones contra Israel desde que empezó la guerra en Gaza, pero han sido interceptados por las defensas aéreas israelíes o por navíos de guerra estadounidenses.