Eman Mhanna, una mujer palestina que reside en España, en Almería, donde trabaja como profesora de universidad, tiene a buena parte de su familia atrapada en Gaza, en un territorio bombardeado todos los días a todas horas tras la declaración de guerra de Israel.
Esta palestina ha narrado a Informativos Telecinco el horror que siente día a día al pensar en su familia atrapada en Gaza: "Sentí muchas cosas, primero miedo. Todos los días siento miedo de leer algún nombre conocido", lamenta.
Eman Mhanna lleva 20 años en España, y desde el estallido de la guerra, vive pegada a las redes sociales: "Los que estamos fuera lo que siempre intentamos hacer es decir, '¿seguís ahí?'. Para ella lo peor es cuando no reciben noticias: "Interpretamos el silencio, y normalmente nos ponemos en lo peor".
Eman señala que es importante empatizar con el otro: "Ha caído esta niña que tenia estos sueños, ha caído esta madre que estaba viendo el futuro de sus hijos", explica. Esta mujer palestina sufre por toda su familia, pero sobre todo, lo que le preocupa es Gaza.
El paso de Rafá entre Egipto y el sur de la Franja de Gaza ha abierto brevemente sus puertas esta mañana para permitir la entrada de la primera remesa de ayuda humanitaria al sur del enclave palestino desde el comienzo de la guerra entre Hamás e Israel el pasado 7 de octubre.
Una veintena de camiones con "medicinas, instrumental médico y una cantidad limitada de alimentos, principalmente comida enlatada", según Hamás, han atravesado el cruce y descargado el material en camiones palestinos que comenzarán el proceso de distribución en el territorio.
Tras la entrega del material, el paso ha vuelto a cerrar sus puertas a la espera de una decisión posterior sobre el tránsito de las personas que llevan días esperando cruzar a Egipto, entre ellas extranjeros y con doble ciudadanía, de acuerdo con la corresponsalía de la cadena CNN presente en el lugar.