Un experto israelí antiterrorista predijo la guerra entre Israel y la Franja de Gaza hace un mes

Israel se encuentra en estado de guerra y vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada. El Consejo de Seguridad, encabezado por el primer ministro, Benjamin Netanyahu, lo ha aprobado oficialmente este domingo. Un día antes, Hamás lanzaba un ataque masivo con más de 2.200 cohetes y sumaba a ello una incursión por tierra.

Netanyahu avisó entonces de que su país se había embarcado "en una guerra larga y difícil" y que van a continuar "sin tregua hasta alcanzar los objetivos". "Entramos en una guerra impuesta por un ataque asesino de Hamás", dijo en una publicación de su cuenta de la red social X, antes Twitter. Pero Yigal Carmon, un experto antiterrorista israelí, ya lo avisó hace un mes.

Los indicios de la guerra, según el experto

En un artículo publicado el 31 de agosto, el fundador y presidente del Middle East Media Research Institute (MEMRI), advirtió de que “últimamente se han registrado cada vez más indicios de que podría estallar una guerra contra Israel en septiembre u octubre de 2023”.

“El desencadenante puede ser una espiral de enfrentamientos violentos que provoquen muchas víctimas, o el uso de nuevas armas que provoquen muchas muertes en el lado israelí, frente a los cuales a Israel no le será suficiente con sus medidas antiterroristas habituales”, explicó entonces en el artículo titulado ‘Señales de una posible guerra en septiembre-octubre’.

“Si bien ni Hamás ni Hezbollah están deseosos de iniciar una confrontación integral con Israel, ésta podría resultar de un deterioro incontrolado sobre el terreno o del uso de armas nuevas e inusualmente mortíferas por parte de estos movimientos”, detallaba quien trabajó en la lucha contra el terrorismo para los exprimeros ministros israelíes Yitzhak Shamir y Yitzhak Rabin.

Argumentaba su postura enumerando y desgranando una serie de factores que apuntarían a la posibilidad del estallido de la guerra. Destacaba así las “crecientes provocaciones por parte de Hezbollah en la frontera norte de Israel”; la “adopción de métodos de lucha en Gaza por parte de organizaciones terroristas islamistas en la Margen Occidental, como el lanzamiento de cohetes y la excavación de túneles de mando y control”; o la “posibilidad de enfrentamientos en Al-Aqsa durante las festividades judías de septiembre, potencialmente provocando violencia también fuera de Jerusalén”.

Asimismo, señaló el “aumento de las amenazas de una guerra regional integral” y la “posibilidad de un aumento sin precedentes en el número de muertes israelíes tras el uso de nuevas armas mortíferas, lo que obligará a Israel a responder incluso a costa de una guerra integral”.