Las cámaras de seguridad de las calles de Marrakech, una de las ciudades afectadas por el seísmo de magnitud 7,2 en la escala de Richter, graban el momento en el que la tierra comienza a temblar. La gente corre despavorida. La intensidad es tal que se siente en España. Los daños personales y materiales son incalculables. Más de 1000 personas han muerto y edificios y calles históricas se han visto afectadas por el seísmo.
El terremoto se detectó a las 23.11 minutos de la noche (0.11 horas en la España peninsular) con una magnitud de 7,2 en la escala de Richter a una profundidad de 10,7 kilómetros, según el Instituto Nacional de Geofísica de Marruecos (ING). El epicentro se ha localizado en la localidad de Ighil, donde numerosos edificios se han derrumbado.
El momento de la sacudida devastó buena parte de las ciudades del sur de Marruecos. En Marrakech, el terremoto sorprendió en cafés, restaurantes y plazas a miles de personas que habían salido a disfrutar de la noche del día festivo. Incontables edificios y mezquitas han quedado destruidos, aunque lo peor es la insoportable cifra de víctimas, más de un millar.
Y los daños materiales son incalculables. Edificios derrumbados, barrios destruidos... La ciudad de Marrakech, declarada Patrimonio de la Humanidad, ha quedado especialmente dañada. Su medina, el casco antiguo de la ciudad con sus estrechas calles, la turística plaza de Yamaa el Fna… han sufrido desperfectos. Otras ciudades, con auténticos tesoros arquitectónicos, también han sufrido las consecuencias del devastador terremoto.