Algunos de los españoles a los que anoche sorprendió el terremoto han vuelto este mañana a la medina de Marrakech. Es el caso de dos empresarios que tienen negocios en esa ciudad: Mónica, que tiene varios comercios, y Bruno, que es propietario dos hoteles.
Ambos han mostrado al programa de Mediaset Cuatro Al día Fin de Semana cómo está ahora la plaza de Yamaa el Fna, donde muchos edificios de adobe se han derruido por el fuerte temblor.
Manuel y sus 9 amigos anoche también pasaron momentos de terror. La mitad del grupo estaba en la plaza de Yamaa el Fna, el centro neurálgico de Marrakech, y la otra mitad en el Riad donde duermen. A solo unos metros, Gio y Ana, de Bilbao, tomaban un refresco en una terraza en lo alto de la plaza. El temblor era tan fuerte que Ana pensó que morirían.
También Juan y su pareja cenaban en un restaurante cuando una nube de polvo y gritos los envolvió al salir. Todos han pasado la madrugada en la plaza o en sus hoteles, como Anheli y César, durmiendo junto a la piscina. Hoy su tour ha salido y los han llevado a la medina. Allí han visto los daños causados por el terremoto.
Al menos 1.037 personas han muerto y otras 1.204 han resultado heridas a causa de un terremoto de magnitud 7 en la escala Richter registrado en la provincia de Al Hauz, según ha informado el Ministerio del Interior de país.
Más de 700 víctimas han resultado heridas de gravedad, si bien todas ellas están siendo trasladadas a varios hospitales de la zona, tal y como han señalado las autoridades en un comunicado en el que han indicado que la mayoría de fallecidos se concentran en la provincia de Al Hauz, con 542 muertos, mientras que la segunda más afectada es Tarudant, con 321 fallecidos.