El 'streamer' Kai Cenat ha sido acusado de incitar a un motín y convocar una reunión ilegal después de que el viernes anunciara un sorteo en el parque Union Square Park de Nueva York en el que los asistentes podrían llegar a recibir una consola gratis.
La cita logró congregar a casi 2.000 jóvenes que incluso llegaron a cometer "actos de violencia contra la Policía" y la gente de la zona cuando el 'streamer' llegó al parque, según ha relatado el jefe del Departamento de Policía de Nueva York, Jeffrey Maddrey.
Cenat, quien cuenta con más de 15 millones de seguidores entre sus perfiles de YouTube, Instagram y Twitch, anunció en esta última plataforma un sorteo gratuito en Union Square Park donde repartiría junto a otro 'streamer' varias consolas PlayStation 5 gratuitas.
Maddrey ha explicado que la asistencia al parque fue exponencial y que lo que en principio se trataba de una reunión de apenas 300 jóvenes, pronto se convirtió en una masa de cerca de 2.000 personas que querían recibir consolas, teclados, auriculares o sillas gratis.
Tal fue el nivel de aglomeración, que la Policía de Nueva York se vio forzada a aplicar el protocolo de respuesta de nivel cuatro, el nivel más alto para hacer frente a desastres, según recoge la cadena de noticias CNN.
Cenat ha tenido que ser evacuado del lugar por "razones de seguridad", mientras que la Policía de Nueva York ha arrestado a 65 personas, incluidos una treintena de menores de edad. Algunos jóvenes y agentes de Policía han resultado heridos.
A medida que se ha desarrollado el caos, se ha visto a un vehículo que intentaba escapar en el que se cree que viajaba Cenat, ya que se la multitud ha comenzado a acosarlo, llegando algunos a agarrarse a los lados del mismo mientras aceleraba. Al menos tres personas han caído al suelo al alejarse el vehículo a toda velocidad.
Cenat ha sido puesto bajo custodia policial para ser interrogado alrededor de las 15.00 horas (hora local) ya que no tenía permiso para ese evento, según ha informado la CBS.
Según los testigos, en la escena se ha podido ver a personas arrojando botellas de agua, pelotas de baloncesto, fuegos artificiales e incluso un ordenador a las calles y un grupo de jóvenes ha llegado a empujar a los agentes antidisturbios cuando intentaban entrar para realizar arrestos.