La Fiscalía francesa cree que las posibilidades de encontrar con vida al pequeño Émile son escasas

La Fiscalía francesa tiene pocas esperanzas de encontrar con vida a Émile, el pequeño de dos años y medio desaparecido el pasado sábado cuando jugaba en el exterior de la casa de sus abuelos en la localidad de Vernet, un pueblo de los Alpes Alta Provenza. Rémy Avon, representante del ministerio público de Digne-les-Bains, ha asegurado en un rueda de prensa que el pronóstico vital de Émile es "muy muy comprometido" como consecuencia de los días que lleva desaparecido y la ola de calor que afecta al país.

Émile apenas mide 90 cm de altura y tras pasar tres noches fuera de su casa sin comer ni beber, en condiciones difíciles de supervivencia y con una ola de calor como la que sufre la zona, es difícil que pueda sobrevivir, como han reconocido las autoridades.

Zapadores de la Legión Extranjera participan en las labores de búsqueda de Émile

Por el momento hay un centenar de agentes rastreando los alrededores de la casa de los abuelos de Émile a los que apoyan docenas de soldados pertenecientes a varios regimientos de zapadores e ingenieros dotados de rastreadores especializados.

Se han rastreado una treintena de edificios en esa zona, al tiempo que se ha entrevistado a 25 vecinos y registrado 12 vehículos en un perímetro de 12 hectáreas, según informa el diario digital 20 Minutes.

Ninguna de estas pesquisas ha dado resultados.

A partir de ahora la búsqueda del pequeño Emile adquiere una dimensión nacional con lo que eso suponen de mejores medios y dotaciones para tratar de localizarle. 

La Fiscalía ha descartado por el momento la existencia de una desaparición criminal, por lo que se siguen líneas de investigación relacionadas con algo fortuito.

El pequeño Émile fue visto por última vez el sábado a las 17:15 horas, solo, en un callejón de la diminuta aldea de veinticinco habitantes, situada a unos 2 kilómetros del propio pueblo de Vernet (125 habitantes).