El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha fallado este viernes a favor de una diseñadora web que se negó a trabajar en bodas entre personas del mismo sexo por motivos religiosos.
La corte ha fallado por seis votos a favor por tres en contra en beneficio de la diseñadora Lorie Smith, cristiana evangélica, al considerar que ha ejercido su derecho a la libertad de expresión de acuerdo con la Primera Enmienda de la Constitución.
Smith demandó al estado de Colorado en 2016 al entender que su rechazo no era un ataque discriminador sino una defensa de sus principios religiosos. El dictamen del Supremo este viernes entiende no solo que Smith estaba en su derecho de negarse a trabajar en esas bodas, sino que nunca incumplió la normativa antidiscriminación del estado de Colorado.
"La Primera Enmienda contempla a Estados Unidos como un lugar rico y complejo, donde todas las personas son libres de pensar y hablar como deseen, no como exige el gobierno", ha hecho saber el juez del Supremo Neil Gorsuch en su escrito de la opinión mayoritaria del tribunal.
Esta sentencia abre la puerta a los empresarios de 29 estados del país donde existe algún tipo de normativa antidiscriminación a este respecto para que eludan cualquier tipo de castigo.
La opinión minoritaria del Supremo ha sido redactada por la jueza Sonia Sotomayor, quien ha denunciado el veredicto como un "revés para el movimiento por la libertad y la igualdad de las minorías", en forma de una "exclusión reaccionaria".
"Tristemente estamos familiarizados con esta situación. Cada vez que los movimientos por los derechos civiles y los derechos de las mujeres han perseguido la igualdad, han acabado enfrentados con instituciones públicas", ha indicado.