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Dos estudiantes que volvían a su residencia después de una fiesta y un hombre de 60 años son las tres víctimas mortales del ataque ayer en Nottingham. El agresor, un hombre con historial de salud mental, está bajo custodia policial mientras se mantienen abiertas todas las hipótesis.
Barnaby Webber, de 19 años, fue apuñalado en Ilkeston, Nottingham, cuando volvía a casa con una amiga tras una noche de fiesta. Sus amigos lo describen como muy deportista, jugaba al cricket.
“Era un amigo mío. Estaba caminando a casa desde un club como todos lo hacemos. Simplemente tuvieron mala suerte. Estaban a solo cinco minutos de casa y ambos fueron apuñalados por un tipo al azar”, ha comentado un estudiante a un diario local.
El club de cricket de Barnaby, Bishops Hull, emitió un comunicado, que recoge Sky Nwes. "Hoy nos enteramos de la muerte de nuestro querido amigo y compañero de equipo, Barnaby Webber".
"'Webbs' se unió al club en 2021 y desde entonces ha sido una parte clave de nuestro club y tuvo un gran impacto en tan poco tiempo. Jugando más de 30 juegos para el club, anotando 622 carreras y tomando 29 terrenos, su memoria vivirá".
Grace Kumar fue apuñalada junto a su amigo Barnaby. A sus 19 años era una estrella del hockey en ascenso, que jugaba en el Southgare de Londres y en la selección sub18 de Inglaterra.
Ian Coates es la tercera víctima mortal. Fue apuñalado cuando se dirigía en su furgoneta blanca al centro educativo donde trabajaba, la Academia Huntington. Coates fue apuñalado en la cercana Magdala Road. El presunto asesino lo sacó de su vehículo y lo apuñaló en el suelo. Su cuerpo fue encontrado a las 5:30 horas por dos transeúntes que pasaban por la zona, ha informado Daily Mail.
La directora del centro, Ross Middleton, le ha recordado como "un compañero muy querido" y al que ahora "se echará mucho de menos", en un mensaje de pésame en el que ha extendido también sus condolencias a todos los afectados por los "trágicos acontecimientos".
El agresor, un hombre de 31 años, le robó su furgoneta blanca. Con ella atropelló a tres personas que estaban en una parada de autobús, que resultaron heridas, una de gravedad.
Mientras, la Policía británica mantiene todas las hipótesis abiertas, incluida la terrorista. No obstante, algunos medios británicos señalan que el atacante, de 31 años, tiene un historial de salud mental.