La colisión ferroviaria en cadena ocurrida el viernes en el estado indio de Odisha deja 288 muertos y en torno a 900 heridos, según la ministra de Finanzas del estado, Pramila Mallick.
Las primeras investigaciones achacan la colisión ferroviaria a un error humano ya que el accidente tuvo lugar después de que el expreso de Coromandel, el principal ferrocarril involucrado en el desastre, abandonase inesperadamente la vía principal minutos antes de la tragedia, según los datos del centro de control inicial analizados por responsables de transportes.
De acuerdo con las imágenes captadas por el centro de Jaragpur, el expreso acabó tomando una línea círcular hasta que acabó colisionando a 127 kilómetros por hora con un tren de mercancías justo al pasado la estación del Bazar de Bahnagar en torno a las 18.55 de la tarde, hora local. Como consecuencia del impacto, el expreso acabó repartido en la vía principal y fue allí donde fue registrada la segunda colisión, protagonizada por un tercer tren, el expreso de Yashwantnagar.
"Cómo ha ocurrido y por qué es algo que se sabrá tras una investigación exhaustiva pero, de buenas a primeras, parece tratarse de un fallo humano", ha hecho saber un responsable de Ferrocarriles bajo condición de anonimato a la cadena NDTV.
En las últimas horas la ministra de Finanzas del estado, Pramila Mallick, ha comunicado 288 fallecidos durante su visita al lugar del accidente, según recoge la televisión india News18. La cifra de heridos se mantiene en torno a los 900.
Los servicios de Rescate, por su parte, han dado casi por terminadas sus tareas y pasarán a partir de ahora a la recuperación de cuerpos entre los hierros del enorme siniestro, el más letal desde el ocurrido en 1995 en Firozabad, en el estado de Uttar Pradesh, que se saldó con 350 fallecidos.
El gobernante Congreso Trinamool en Bengala Occidental ha exigido el viernes la renuncia del ministro de Ferrocarriles, Ashwini Vaishnaw, quien ya ha anunciado que ha abierto una investigación para determinar las causas del accidente y también ha dado el pésame a los familiares y amigos de las víctimas.
Las autoridades indias han anunciado una serie de indemnizaciones de hasta 200 000 rupias (más de 2 250 euros) para los familiares de las víctimas, y hasta 50 000 rupias (más de 560 euros) para los heridos, recoge la cadena de televisión NDTV.