Un hombre ha sido condenado en Estados Unidos por arrastrar con su coche a un policía que acabó rompiéndose la espalda. El agente iba a detener al sospechoso y se subió al techo del vehículo pero el conductor aceleró.
La escena vivida en Iowa, Estados Unidos, es de película.
Los agentes de policía pararon el vehículo y le pidieron la documentación al conductor. Sin embargo, este no quiso entregarla.
Cuando trataban de detenerlo, el hombre se negó a salir del coche y un agente optó por subirse al capó para evitar que se marchara.
Sin embargo, el conductor aceleró con el agente en lo alto del coche.
Tras un recorrido con el agente encima del coche, a gran velocidad e intentando no caer, el delincuente se metió en una cuneta haciendo que saliera disparado.
En esa brutal caída, el agente se rompió la espalda. El conductor ha sido sentenciado ahora en el juicio por un delito grave de lesiones. Dijo que el agente, había complicado la situación.