Al menos 291 personas han sido detenidas este lunes en todo Francia, en el marco de las movilizaciones por el Día del Trabajador, que más allá de episodios violentos, ha congregado a unas 782.000 personas, según el Ministerio del Interior.
El ministro del Interior francés, Gérald Darmanin, ha informado de que, con motivo de los enfrentamientos entre algunos manifestantes y la Policía, en los márgenes de las movilizaciones, unos 108 agentes han resultado heridos, de los cuales 19 han tenido que ser hospitalizados.
"Si la gran mayoría de los manifestantes eran pacifistas, en París, Lyon y Nantes en particular, la Policía se enfrenta a matones extremadamente violentos que venían con un objetivo: matar policías y atacar la propiedad de los demás", ha denunciado el ministro Darmanin en Twitter.
Darmanin ha cifrado en 300 las incidencias ocurridas en todo Francia. En París, un agente se encuentra en el hospital con heridas graves tras ser alcanzado por un cóctel molotov y 90 personas han sido detenidas.
La primera ministra de Francia, Elisabeth Borne ha calificado de "inaceptables" las escenas de violencia que se han registrado al margen de unas movilizaciones, que en París han sacado a las calles a 112.000 personas, según la Policía.
Si bien las cifras que ha ofrecido el Ministerio del Interior se quedan muy lejos de las aspiraciones de los sindicatos --que buscaban superar la movilización récord del 7 de marzo contra la reforma de las pensiones que sacó a las calles del país a cerca de 1,28 millones de personas-- son muy superiores a las del año pasado, cuando unas 116.500 marcharon en Francia por el Día del Trabajador.