{{#section.link.href}}
{{section.link.title}}
{{/section.link.href}}
Tierra Santa se calienta. El Ejército de Israel ha irrumpido por segunda vez en 24 horas en la mezquita de Al Aqsa, en Jerusalén, y han lanzado balas de goma, granadas y gases lacrimógenos contra los fieles musulmanes en una noche especialmente simbólica en la que comienza Pésaj, la Pascua judía, y en pleno mes de Ramadán.
La Media Luna Roja Palestina en Jerusalén ha señalado que se encuentra trabajando en las inmediaciones del lugar y que ya ha recibido a heridos, aunque por el momento se desconoce un balance oficial, según ha informado la agencia de noticias WAFA.
La Policía de Israel había atacado en la madrugada del miércoles con gases lacrimógenos y bombas de ruido la mezquita de Al-Aqsa, en Jerusalén. Una operación que dejaba varios heridos y más de 400 personas detenidos.
La Policía de Israel trató de evacuar la mezquita de Al-Aqsa, en un momento en el que cientos de fieles se encontraban reunidos dentro como parte de la celebración del Ramadán musulmán, algo que ya ocurrió durante la pasada semana, también durante la celebración religiosa.
Los musulmanes, que este mes se encuentran celebrando el Ramadán, se encontraban en la noche del martes rezando en la mezquita, que estaba llena de mujeres, niños y personas mayores, además de hombres, según el medio palestino Maan. Sobre las 22.00 horas (hora local) los antidisturbios israelíes se colocaron en las puertas de la mezquita, impidiendo el paso a los fieles.
Poco después entraron en el edificio, según la agencia Maan dejando decenas de heridos por balas de goma, gas pimienta y granadas aturdidoras, obstaculizando que los servicios médicos accedieran al templo a atender a los afectados.
Las Fuerzas de Seguridad habrían desalojado después a las mujeres y niños de la mezquita, y luego habría comenzado el enfrentamiento con los hombres, que según fuentes de la Policía, citadas por el medio israelí 'Jerusalem Post', se atrincheraron en una de las salas de la mezquita, respondiendo con el lanzamiento de palos, piedras y fuegos artificiales dirigidos hacia los agentes.
La violencia en los territorio ocupados por Israel en Cisjordania y Jerusalén ha aumentado en el último año y existe la preocupación de que las tensiones puedan intensificarse este mes, cuando el mes sagrado musulmán del Ramadán coincide con la Pascua judía y la Pascua cristiana.
Las fricciones en el recinto de la mezquita de Al-Aqsa, conocido por los judíos como el Monte del Templo, han desatado la violencia en los últimos años.
Los vídeos que circulan por las redes sociales muestran la violencia de la Policía de Israel golpeando a fieles palestinos en el interior de la mezquita.
Las Fuerzas de Defensa de Israel han informado además este miércoles por la noche del lanzamiento de dos cohetes desde la Franja de Gaza en el marco de un repunte de tensiones después de la incursión de las fuerzas de seguridad israelíes en la mezquita de Al Aqsa en la víspera.
El Ejército israelí ha detallado que uno de los proyectiles ha aterrizado dentro de la Franja de Gaza, mientras que el otro ha golpeado un área cercana a la valla fronteriza. Por el momento, ningún grupo ha reivindicado su autoría, según ha informado el diario 'The Times of Israel'.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas celebrará el jueves una sesión de emergencia a puerta cerrada, convocada por Emiratos Árabes Unidos, así como por China y el representante de la Liga Árabe, para tratar el repunte de la violencia en Jerusalén, según el citado medio.
Varias manifestaciones y vigilias han sido organizadas a lo largo de la jornada en distintos puntos de la región, como en la ciudad de Hura, ubicada en la región de Néguev, o en Um al Fahm, en un distrito de Haifa, ha informado la agencia de noticias WAFA.
Durante la tarde, las alarmas aéreas se han disparado por una falsa advertencia. "La advertencia que se activó en el norte cerca de Nahal Shion y Kibbutz Shanir aparentemente es falsa", ha asegurado anteriormente el Ejército israelí en su perfil de Twitter.
Esto se produce después de que durante la madrugada las milicias del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) lanzaran varios cohetes desde la Franja de Gaza contra territorio israelí "en respuesta al asalto a la mezquita y al ataque a los fieles por parte de las fuerzas de ocupación". Tras ello, el Ejército de Israel llevó a cabo varios ataques aéreos en la Franja en represalia.