Un rescatista, a punto de morir al ser golpeado por un frigorífico cuando buscaba a dos desaparecidos en Perú

Estremecedora imagen en San Martín de Porres, Perú, en el momento en que un rescatista se encontraba trabajando en una operación para localizar a dos desaparecidos tras el derrumbe de una parte de su vivienda. Ambos, una madre y su hijo, cayeron varios metros hacia el río Rímac, situado justo debajo de la casa.

El rescatista estaba en esos instantes buscando sus cuerpos cuando, de pronto, un nuevo derrumbe le sorprendió, siendo golpeado por un frigorífico y varios cascotes. Antes de él, en la misma zona, a la que se desplazaron decenas de efectivos de bomberos, otros dos rescatistas trabajaban en el lugar, pero los constantes derrumbes y la caída de escombro obligaba a abortar la operación.

Con los dos primeros a salvo, fue cuando izaban al tercero de ellos cuando sucedió el dramático momento: parte de la estructura de la vivienda volvía a colapsar y, con ello, un gran frigorífico se precipitaba al vacío golpeándolo directamente.

Entre gritos de terror de todos los vecinos que contemplaban la escena, y ante la desesperación del resto de sus compañeros, el rescatista quedaba inconsciente. Varios escombros también se le habían venido encima pero, por fortuna, continuaba atado a la cuerda desde la que le estaban alzando y, pese a que resulte difícil de creer viendo las imágenes que registraron el suceso, se encuentra a salvo.

Tras conseguir ponerle en un lugar seguro y extremadamente nerviosos, sus compañeros le llevaron rápidamente ante los efectivos sanitarios, que le trasladaron al hospital.

Ahora, milagrosamente, se recupera del brutal impacto.

El rescatista golpeado por el frigorífico se encuentra estable

Por su parte, los bomberos y las autoridades, cuando apenas han pasado unos días desde el terremoto en Ecuador junto al a frontera con Perú, han insistido en la peligrosidad que entrañan este tipo de construcciones, situadas sobre terreno inestable. El incremento del caudal del río Rímac ha vuelto a ponerlo en evidencia, provocando el colapso de distintas vovoemdas al debilitarse sus cimientos.

Es lo que le sucedió al domicilio de María Rosana Reyes, de 35 años, y su hijo Rubén Ángel Flores, de 18, quienes estaban en el interior de su estructura cuando se derrumbó, cayendo con ello al río.

Tras el suceso, la Policía Nacional del Perú (PNP) y el Cuerpo General de Bomberos se movilizaron para iniciar su búsqueda al tiempo en que la corriente del río continuaba dañando los cimientos de las viviendas, provocando con ello la caída de tierra y cascotes.

Afortunadamente, el rescatista que protagoniza el estremecedor vídeo que abre esta noticia, identificado como Joao Yolqueda, se recupera en el Hospital de la Policía, en el distrito de Jesús María, donde se encuentra estable.