Si hay un lugar en el que preocupa la situación de las mujeres y las niñas, en el que viven ninguneadas y expuestas, es Irán. Los ataques con gas tóxico contra escuelas femeninas se suceden día tras día. Para el líder supremo es un crimen imperdonable. Sin embargo, la oposición denuncia una campaña orquestada y tolerada por el Gobierno, para que las niñas no estudien.
Otras 46 niñas han sido envenenadas en dos días en escuelas de Irán. Todas salen casi ahogadas, sin poder respirar a las puertas del colegio.
Las niñas han necesitado hospitalización tras sufrir mareos, taquicardia y vómitos. Sus padres, desesperados, se agolpan a las puertas de las escuelas y en muchos casos son detenidos e introducidos en estas furgonetas.
Para tratar de calmar los ánimos, el líder supremo ha calificado los envenenamientos como un "crimen imperdonable", al tiempo que ha ordenado liberar a 80.000 presos, la mayoría mujeres detenidas durante las protestas tras la muerte de Mahsa Amini.
Sin embargo, la oposición cree que estamos ante una campaña organizada y tolerada por el Gobierno de Irán porque todos los ataques se producen de la misma forma, con el mismo gas, y las niñas tienen los mismos síntomas.
La Unión Europea ha pedido a Irán una investigación "seria" sobre esta agresión al derecho a la educación de las mujeres.
En total, en los últimos dos días en Irán se han sucedido unos 300 ataques en escuelas femeninas en 16 provincias del país.