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La tensión entre Estados Unidos y China no deja de crecer. La última razón está tras el globo chino derribado por las fuerzas estadounidenses, al que ha seguido a su vez la destrucción de otros objetos no identificados en el espacio aéreo norteamericano. La cadena de acontecimientos, –con la palabra ovnis incluida–, ha causado un gran impacto con multitud de ciudadanos de todo el mundo preguntándose: ¿Por qué se han detectado y derribado tantos objetos en los últimos días?
En estos momentos, EEUU y China se acusan acusan mutuamente de haber sobrepasado sus espacios aéreos con programas de espionaje. La Casa Blanca ha descartado que los objetos tengan relación alguna con los extraterrestres, una hipótesis que disparó el general del Comando Norte de la Fuerza Aérea estadounidense, Glen D. VanHerck, al contestar con un “yo no he descartado nada en este momento” al ser preguntado por una periodista del New York Times sobre la posibilidad de haber localizado objetos alienígenas o extraterrestres.
La realidad, no obstante, es que el Gobierno de Estados Unidos aún no ha determinado qué eran los últimos tres objetos aéreos derribados, si bien han explicado que volaban a la altura del tráfico comercial, y por eso se derribaron, por el potencial peligro.
También se refieren a un potencial espionaje. La Casa Blanca, concretamente, está hablando de un programa de globos chino utilizado en 40 países del mundo, pero en Washington sigue habiendo muchas preguntas sin respuesta.
Sobre la detección y el derribo de tantos objetos en los últimos días, contestan: una de las razones para ello es que se está buscando más, y por eso se están encontrando más objetos: porque se han ampliado los filtros y los radares de búsqueda, así que están localizando todo tipo de objetos privados, comerciales y públicos de Gobiernos extranjeros.
Primero fue el globo chino detectado en Montana y después el que sobrevolaba Latinoamérica, derribado el pasado domingo sobre el Atlántico tras cruzar toda Norteamérica. Tras él no han dejado de sucederse situaciones similares con el mismo final: las fuerzas de EEUU interviniendo para eliminar los objetos localizados.
Según el Gobierno de Estados Unidos, del globo chino interceptado sobre el océano Atlántico se han recuperado sensores que probarían que tenía herramientas para recoger comunicaciones electrónicas.
En esta línea, las autoridades estadounidenses han especificado que su Ejército envió aviones espía de la época de la Guerra Fría para rastrear y estudiar el presunto globo espía chino antes de que fuera derribado.
Según las conclusiones obtenidas, este tipo de globos ha sobrevolado más de 40 países en los cinco continentes y, además, estarían fabricados por una o varias empresas que venden oficialmente productos a las Fuerzas Armadas de China.
No obstante, investigadores del Departamento de Defensa, del FBI y otras agencias del país continúan examinando los restos que ha sacado la Marina estadounidense de las aguas de la costa de Carolina del Norte, donde cayó el cuerpo del globo y que ha sido entregado este lunes.
Seguros de que la mayor parte de los componentes electrónicos se encuentran esparcidos en el fondo del océano, funcionarios del FBI han afirmado que conocer exactamente qué tipo de información de comunicaciones podía recoger el globo es una prioridad absoluta.
En esa línea, los investigadores tratan de determinar también si alguno de los equipos del globo utiliza tecnología estadounidense o de otras empresas occidentales, según recoge ‘The New York Times’.
Antes de su derribo el 4 de febrero tras la orden del presidente Joe Biden, el globo estuvo varios días sobrevolando territorio estadounidense y canadiense.