Fosas comunes y morgues improvisadas en Turquía y Siria tras el terremoto: la cifra de muertos sigue creciendo

La cifra de víctimas mortales tras el terremoto en Turquía y Siria no deja de elevarse: se calcula que son ya más de 10.000, pero se teme que la tragedia continúe extendiéndose, con multitud de personas todavía desaparecidas entre los escombros mientras los equipos de rescate trabajan sin descanso en busca de supervivientes.

Son tantos los fallecidos, y tan graves los destrozos, que no hay lugar para almacenar los cuerpos, que en ocasiones se amontonan en las entradas de hospitales o en tanatorios. Allí, en morgues improvisadas, esperan que algún familiar o conocido acuda para identificarlos.

Mientras, en algunas localidades han comenzado a cavar fosas comunes para aquellos que no lleguen a ser reclamados.

Múltiples personas permanecen atrapadas o sepultadas entre los escombros del terremoto

Pese a que los efectivos que trabajan en la zona han efectuado ya miles de rescates, entre ellos algunos milagrosos como el de la bebé recién nacida entre los escombros a la que encontraron con vida y todavía unida al cordón umbilical de su madre muerta, la tragedia es de tal magnitud que los equipos de emergencia solo pueden auxiliar a tiempo a una parte de las víctimas.

Apenas unas pocas están a la vista, algunas de ellas esperando atemorizadas en edificios inclinados que amenazan con unirse a los miles que se han derrumbado con el seísmo. La mayoría, sin embargo, permanecen sepultadas o atrapadas entre toneladas de escombros.

La situación para estos últimos es tal que, en ocasiones, es demasiado arriesgado acceder a ellos, pese a los ruegos de los familiares para que no se abandone la búsqueda.

Turquía y Siria trabajan sin descanso en la búsqueda de supervivientes

En esta situación, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha declarado el estado de emergencia durante tres meses, al tiempo en que ha creado un Centro de Gestión de Crisis en el Ministerio de Defensa para "enfrentar este gran desastre", con el fin de transportar al personal y el equipo de rescate a través de un puente de ayuda aérea.

Concretamente, 2.600 miembros del personal de rescate han sido trasladados de varios puntos del país a los lugares afectados, junto con 78 vehículos, otros materiales y 75 aeronaves, según ha precisado el ministro de Defensa, Hulusi Akar.

Mientras, en Siria, el Ministerio de Sanidad ha explicado que todos están trabajando a la máxima capacidad: "Estamos en una carrera contra el tiempo y trabajando con las máximas energías disponibles y con la cooperación de todas las partes", han señalado en un comunicado.