Un turista neozelandés ha muerto al caerse desde un tren a un acantilado en la provincia tailandesa de Kanchanaburi, a 140 kilómetros de Bangkok. El hombre se encontraba realizando un viaje que recorría la ruta del conocido 'tren de la muerte' cuando cayó del vagón mientras intentaba hacerse un selfi.
El tren atravesaba un puente de madera, de unos 400 metros de longitud, cuando disminuyó su velocidad para facilitar la toma de fotos por parte de los pasajeros, al encontrarse en un punto popular: el río Kwai. En ese momento, el hombre identificado como Patrick Ward, abrió la puerta del vagón para hacerse un selfi y acabó resbalándose y cayendo desde 8 metros de altura, según declaraciones de testigos a la Policía recogidas por el diario Bangkok Post.
Las autoridades fueron alertadas en el momento de que un hombre había caído desde un tren cerca de la cueva de Krasae, en el distrito de Sai Yok. Los equipos de rescate bajaron con un sistema improvisado de poleas ya que no había ninguna forma preconstruida para bajar al lugar donde se encontraba Patrick. Finalmente lograron bajar y encontrar al hombre con vida aunque en estado muy grave ya que presentaba problemas para respirar al haberse roto el brazo derecho y el cuello en la caída. Durante media hora, los servicios de emergencia trataron de reanimarle pero Ward acabó falleciendo, según informa The Nation.
La ruta, popularmente conocida como el 'tren de la muerte', conecta Tailandia y Birmania y fue construida entre 1940 y 1943 por unos 250.000 trabajadores civiles y 60.000 prisioneros de guerra tomados por Japón durante la disputa mundial. De hecho, el nombre de la película sobre la Segunda Guerra Mundial, 'El puente sobre el río Kwai', viene inspirado en el lugar de la tragedia, pues de todas las personas que colaboraron en la construcción, más de 100.000 perdieron la vida.
Esta película, dirigida por David Lean y protagonizada por Alec Guinness y William Holden, ganó siete premios Óscar.