Todo indica que Pedro Castillo no solo ha intentado dar un autogolpe de Estado, sino que además ha calculado muy mal sus fuerzas. Con la mano temblorosa, anunciaba al país que disolvía el Congreso, suspendía los derechos constitucionales y nombraba un ejecutivo de emergencia. Castillo estaba acorralado. Hoy mismo se votaba la tercera moción de censura contra él en poco más de un año.
El presidente del Tribunal Constitucional y toda la prensa hablaba ya de golpe de Estado. Pedro Castillo tampoco contaba con el apoyo del ejército ni de la policía. Era detenido al salir del palacio presidencial. Cuando corrió el rumor de que pretendía huir a México, cientos de ciudadanos corrían a la embajada de ese país en Lima para bloquear los accesos. Tampoco el ya depuesto presidente ha contado con apoyo popular.
A estas horas, cesado por abrumadora mayoría en el Congreso por incapacidad moral, ya tiene sustituta. Dina Boluarte, hasta ahora vicepresidenta, será la primera jefa de Estado en la Historia de Perú.
La mandataria fue ministra de Desarrollo e Inclusión Social desde el inicio del Gobierno de Castillo, el 28 de julio de 2021, hasta fines de noviembre, cuando el escenario político se agravó con la confirmación de que el Congreso iba a someter al expresidente a una tercera moción de destitución por "permanente incapacidad moral".
Durante su periodo como vicepresidenta, Boluarte representó a Castillo en varios viajes fuera del país, en los que no fue autorizado a desplazarse por el Parlamento, el último de los cuales fue la cumbre del Foro de Cooperación Asia Pacífico (APEC) en Tailandia en noviembre pasado.
Asimismo, defendió el papel de la mujer en los eventos en los que participó como en la última Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) en la que afirmó que "no hay desarrollo sostenible sin el desarrollo de las mujeres" y destacó el compromiso del Perú con el empoderamiento de las mujeres a través de políticas innovadoras, aunque persistan estereotipos y acoso político contra las líderes.
También fue presidenta del Club Departamental Apurímac, un cargo para el que realizó trámites de transferencia de funciones que le valieron una investigación del Congreso, que finalmente decidió que no había cometido una infracción constitucional.
Boluarte, nacida precisamente en la región surandina de Apurímac, se postuló a un cargo político por primera vez en los comicios municipales de 2018 y nuevamente intentó una curul en el Congreso en las elecciones extraordinarias de 2020 con Perú Libre, movimiento que la incluyó en la fórmula presidencial de Castillo un año después.
"Juro por dios, por la patria y por todos los peruanos que ejerceré fielmente el cargo de presidente de la república, que asumo de acuerdo con la Constitución, desde este momento hasta el 26 de julio de 2026", ha expresado tras recibir la banda presidencial de manos del presidente del Congreso, José Williams Zapata.
"Defenderé la soberanía nacional, la integridad física y moral de la república y la independencia de las instituciones democráticas. Que cumpliré la con la Constitución y las leyes de Perú, reconociendo la libertad de culto y la formación moral de los peruanos", ha manifestado Boluarte con la mano en la Biblia.
"Esta difícil coyuntura nos pone a aprueba a todos los ciudadanos. Antes que política soy una ciudadana y una madre peruana que tiene pleno conocimiento de la responsabilidad que la historia pone en mis hombros", ha dicho posteriormente ya en su primer discurso como presidenta de Perú.
"Se ha producido un intento de golpe de Estado, una impronta promovida por el señor Pedro Castillo, que no ha encontrado eco en la instituciones de la democracia y la calle. Este Congreso, atendiendo al mandato constitucional, ha tomado una decisión y es mi deber actuar en consecuencia", ha recalcado.
En su primera intervención ante el Congreso como presidenta, Boluarte ha hecho un llamamiento "a la unidad de todos los peruanos", ganándose los aplausos del hemiciclo. "Nos corresponde conversar, dialogar, ponernos de acuerdo, algo tan sencillo, como tan impracticable en los últimos meses", ha lamentado.