Universitarios iraníes derriban una pared divisoria entre hombres y mujeres y queman un velo

La represión en las protestas en honor a Masha Amini, la joven kurda-iraní que murió bajo custodia por llevar mal puesto el velo, no consigue aplacar el descontento social en Irán. Las manifestaciones contra el régimen continúan, especialmente, por parte de los estudiantes. Hoy una turba de jóvenes han derribado la pared divisoria entre mujeres y hombres en la cafetería de la universidad de Hormozgan, en la región iraní de Bandar Abbas

Una multitud jalea la quema de uno de los velos cuyo uso ha sido impuesto por el integrismo gobernante. En la concentración se reclama "libertad" y se proclama abiertamente el rechazo al régimen, mientras otro grupo a derribado la pared que segregaba a los estudiantes por sexo en la Universidad de Hormozgan, una de las zonas más conservadora de Irán.

El aviso del comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán

Cabe destacar que estas manifestaciones se dan a pesar del aviso del comandante de la Guardia Revolucionaria de Irán, quien el sábado dijo que "las protestas se acaban hoy", en un mensaje a los participantes de las marchas que desde hace 40 días recorren el país.

"Los manifestantes no deben poner a prueba la paciencia del sistema", avisó el sábado el general antes de dirigirse directamente a los jóvenes del país: "Las protestas se acaban hoy. No salgáis más a la calle".

Un día después, el Parlamento de Irán aprobó una subida del 20 por ciento a los salarios de las fuerzas de seguridad del Estado esgrimiento que este aumento tiene como objetivo reflejar el peligro para la seguridad al que se enfrentan las fuerzas de seguridad en relación a los funcionarios civiles, según informa la agencia oficial de noticias iraní IRNA.