Este jueves una persona apuñaló a varias en un centro comercial en Milán. Entre los heridos está el futbolista español, Pablo Marí, defensa del Monza, que estaba con su mujer y su bebé en el momento del suceso. “Tuve suerte porque vi morir a una persona frente a mí”. El atacante fue detenido.
"Tuve suerte porque vi morir a una persona frente a mí. Estaba con el carrito con mi bebé y sentí un dolor insoportable en la espalda”, ha contado el futbolista desde la cama del hospital donde se recupera al el director general del Monza, Adriano Galliani, y su entrenador, Raffaele Palladino.
“Después de eso vi a este hombre apuñalar a una persona en la garganta, frente a mí. Estoy bien, el lunes estaré en el campo", ha afirmado el jugador, que iba con su bebé en el carrito y su mujer cuando ha sucedido la tragedia.
Marí se encuentra bien, consciente, después de recibir una puñalada en la espalda, según informa el diario Marca. Aunque él dice que el lunes estará en el campo habrá que esperar a la evolución de su herida en la espalada que ha sido profunda.
En la tarde de ayer, un hombre, que fue detenido en el lugar de los hechos, cogió un cuchillo en un centro comercial en Milán y apuñaló a varias personas, entre ellas al futbolista. Dejó un muerto y cinco heridos, entre ellos un menor, que entró en parada pero que fue reanimado y trasladado a un hospital.
El fallecido es un cajero del supermercado, de unos 30 años, que murió en el helicóptero camino del hospital.
El detenido ha pasado su primera noche en prisión. Algunas fuentes señalan que podría padecer un trastorno mental.