Al menos diez personas han fallecido, entre ellas dos adolescentes y una niña, y ocho han resultado heridas este viernes después de que se haya producido una explosión en una estación de servicio en la localidad irlandesa de Creeslough, en Donegal, en el noroeste del país, según el último balance de la Policía Nacional irlandesa, la Garda.
De los heridos, uno se encuentra en estado crítico y ha sido trasladado de emergencia a un hospital de Dublín. Los otros siete heridos se encuentran estabilizados, según ha informado un portavoz en rueda de prensa recogida por el 'Irish Times'. Las autoridades no esperan encontrar más fallecidos entre los escombros de la gasolinera.
Alrededor de las 15.20 horas la estación de servicio saltó por los aires causando además el derrumbe de un bloque de apartamentos de los alrededores y otros que han resultado gravemente dañados, según recoge el diario local 'Irish Examiner'.
El primer ministro de Irlanda, Micheal Martin, ha afirmado que sus "pensamientos y sus oraciones" están con la comunidad de Creeslough y con los equipos de rescate que están trabajando allí. Por su parte, el vicepresidente del Gobierno, Leo Varadkar, ha descrito lo sucedido como "noticias terribles".
El Hospital Universitario Letterkenny, donde se está tratando a los heridos ha iniciado un plan de emergencia y ha aconsejado al resto de ciudadanos que no acudan al departamento de emergencias esta noche. "Comuníquense con su médico de cabecera en primer lugar o contacte con el servicio de NowDoc --un hospital cercano--", ha indicado un portavoz del centro.
También se ha restringido el tráfico aéreo sobre el lugar de la explosión para facilitar el acceso de los helicópteros de rescate durante toda la noche. Los caminos hacia esa localidad también han sido acordonados y la Policía ha invitado a usar rutas alternativas a los conductores.