Las manifestaciones contra el régimen de Irán siguen creciendo y sumando nuevas adhesiones dentro y fuera del país, que registra más de 10 días de protestas. Al menos 76 personas han muerto ya en esas marchas que comenzaron por la muerte de Mahsa Amini a manos de la policía de la moral. Entre las últimas víctimas reportadas, Hadith Najafi, de 20 años, todo un símbolo de lucha que recibió seis disparos. Las autoridades persas continúan reprimiendo con mano dura, y con su férreo control de internet complican cada vez más la difusión de lo que allí ocurre.
Cada vez es más difícil que los vídeos superen el férreo control de internet impuesto por los ayatolás. Pero, aún a cuentagotas, se pueden ver desafiantes escenas como esta: camuflados en la oscuridad de la noche, un grupo de vecinos deseaba a gritos la muerte del líder supremo de la República Islámica de Irán. Y eso que ya van más de 1.000 detenidos y 76 muertos en estos 12 días de protestas. Entre los últimos arrestos por rechazar la imposición del velo, el de Faezeh Hashemí Rafsanyaní, hija de un expresidente.
Incluso en los funerales asoma el coraje de las mujeres, que aparecen agitando con rabia sus pañuelos. Ahora ya no están solas, la insurrección ya es transversal. Figuras muy carismáticas, como pueden ser futbolistas o cantantes, se están manifestando a favor de los protestantes, según apuntan los expertos. Algunos deportistas, muy conocidos a nivel internacional, incluso se rapan el pelo.
A modo de protesta, la selección de fútbol de Irán ocultó los símbolos nacionales de sus camisetas mientras sonaba el himno durante un amistoso jugado en Austria. Ahora, el movimiento ya da la vuelta al mundo, algo patente en redes sociales. El Gobierno de España también ha convocado al embajador de Irán para protestar por la brutal represión que sufre el país asiático.