Brahim Saadoun, un prisionero de guerra marroquí, ha regresado este sábado a casa después de que Rusia acordara liberar a diez presos capturados en Ucrania, una medida negociada por Arabia Saudí. Saadoun ha sido recibido entre lágrimas por su padre, Taher Saadoun, y por decenas de medios de comunicación a su llegada a Casablanca.
Saadoun había sido sentenciado a muerte por Rusia tras ser hallado culpable de actividades de mercenario y de cometer acciones destinadas a tratar de desestabilizar el poder.
Fue el 9 de junio cuando un tribunal de la RPD condenó a muerte a los ciudadanos británicos Shaun Pinner y Aiden Aslin, así como al marroquí Brahim Saadoun, acusados de participar en las hostilidades como parte de las formaciones armadas ucranianas como mercenarios.