La amenaza de un ataque nuclear de Rusia vuelve a ser una posibilidad real. Pero ¿cuál es el verdadero potencial atómico con el que cuenta Moscú? El teniente general del Ejército, Francisco José Gan Pampols, ha explicado este miércoles en Informativos Telecinco las armas que podría utilizar el líder del Kremlin, así como la movilización de reservistas y las contraofensivas de las tropas de Kiev.
Respecto a la movilización de la población rusa, el teniente general Gan Pampols asegura que no ocupa todos los ciudadanos. "Lo que hemos visto, el hecho de decretar una reserva, aunque sea parcial, es una decisión de carácter político que muestra una voluntad decidida a sostener un conflicto en el tiempo", señala el militar. "Esa movilización no será lineal, no se llamarán a 300.000 personas, sino que se utilizará el concepto de 'revelos de puesto táctico': aquellas personas ya adiestradas para ocupar un puesto concreto dentro de un equipo, unidad o sistema", precisa.
En cuanto a la conocida triada nuclear, el experto destaca diferencias con las armas nucleares tácticas: "La triada nuclear abarca misiles intercontinentales con base en tierra, o con base en buques de superficie, en submarinos y plataformas aéreas. De lo que habla Vladímir Putin es de armas nucleares tácticas, es decir, elementos que no tienen forzosamente que lanzarse de ninguno de los vectores que mencionábamos. Se pueden lanzar desde cazabombarderos, con bombas de gravedad, desde dispositivos de artillería, como cañones o desde misiles, como los que hay ahora, que conocemos, de alcance medio".
El líder del Kremlin, con su advertencia a Occidente, habla del potencial que todavía no ha mostrado: "En pura teoría de la disuasión, nunca se utiliza toda la fuerza, porque hay que trabajar sobre la hipótesis de que el adversario entienda que nosotros podemos escalar. Si empleamos todo lo que tenemos en el primer momento, difícilmente vamos a poder influir en su voluntad. Lo probable, en el caso de que se decidiera, que sería la última de las opciones -ya que antes agotaría la capacidad convencional sobre el terreno, como reservistas o unidades en territorio de la federación que entrarán en Ucrania para la contraofensiva-, sería utilizar un arma nuclear táctica", precisa el teniente general.
La amenaza nuclear levanta escalofríos en todo el planeta, pero la principal cuestión es dónde podría producirse el ataque. "En mi opinión, lo haría sobre alguna zona que, de una forma bastante determinante, influyese en la posibilidad de desarrollo de Ucrania, como algún conjunto hidroeléctrico, de presas o algún conjunto fabril de gran tamaño. Porque la característica fundamental de las armas nucleares tácticas es su gran potencia destructora, pero su limitado alcance", comenta el teniente general.
Y es que las consecuencias podrían ser catastróficas en la zona que reciba el ataque: "Si pensamos en proyectiles nucleares de un kiloton, es decir, de 1.000 toneladas de trinitrotolueno, es la dieciseisava parte de lo que actuó en Hiroshima y la venteaba parte de lo que actuó en Nagasaki. Podría ser una zona de destrucción completa de un cuadrado de 2x2 hasta 4x4 kilómetros", precisa el militar". El presidente de Rusia ha puesto al mundo en alerta.
El informe más actualizado revela que Rusia cuenta con 4.477 ojivas nucleares, los dispositivos que desencadenan una explosión atómica, porque 1.500 habrían sido desmanteladas. Por tanto, el líder del Kremlin tiene casi 1.600 cabezas nucleares desplegadas estratégicamente, 812 en misiles balísticos terrestres, unas 200 en bases de bombarderos pesados y 576 en submarinos nucleares que realizan maniobras por todo el mundo y podrían atacar en cualquier punto en cualquier momento.