La India es un país extremadamente peligroso para las mujeres, las violaciones se cuentan a diario y el último caso que se ha conocido ha conmocionado a la sociedad hindú. Dos hermanas han sido violadas, asesinadas y colgadas de un árbol. Ambas eran menores de edad y pertenecían a la comunidad dalit o intocables, el escalafón más bajo de la sociedad de castas hindú, la jóvenes fueron colgadas para simular un suicidio. Se suma este caso a otro que impactó en India el pasado mes de junio, fue el de la violación de una madre y su hija, de tan solo seis años.
El pasado jueves, la Policía India anunciaba la detención de los seis acusados que supuestamente llevaron a cabo el crimen. Según un vídeo que circula por las redes sociales, las dos menores fueron encontradas colgando de un árbol atadas del cuello con una dupatta roja o bufanda, juntas, vestidas con la tradicional kurta india en el distrito de Lakhimpur Kheri, en el estado de Uttar Pradesh. Así lo recoge El Periódico.
El superintendente de Policía de Lakhimpur Kheri, Sanjiv Suman, explicó en una rueda de prensa que un amigo de las jóvenes las presentó a otros tres chicos que, tras llevarlas en sus motos al campo, las violaron.
"Primero las forzaron para mantener relaciones sexuales en contra de su voluntad", confirmó el agente, y luego las hermanas les dijeron que ahora tendrían que casarse con ellas, al corromper su honor, desencadenando una discusión que llevó al asesinato, anotó. "Los chicos las mataron estrangulándolas con una dupatta. Entonces llamaron a otros dos chicos y (...) las colgaron de un árbol", cuenta. La autopsia concluye que las jóvenes fueron violadas y estranguladas.
El brutal crimen ha desencadenado una oleada de protestas, en las que familiares, vecinos y allegados exigieron justicia a la Policía y el arresto inmediato de los culpables. "Todo lo que queremos es la pena de muerte para los acusados, eso es todo", afirmó a la agencia india ANI el hermano de las víctimas.
Además, activistas y políticos representantes de la comunidad dalit, como Chandra Shekhar Aazad, culpa a la policía de no brindar seguridad a las mujeres. Por su parte, la exjefa de Gobierno regional Mayawati, ha criticado a la nueva cúpula gubernamental. "Los criminales en Uttar Pradesh no tienen miedo porque las prioridades del Gobierno están mal", destacó Mayawati. Las autoridades indias han evitado identificar a los acusados como miembros de una casta o religión particular, evitando así posibles choques comunitarios.
El sistema de castas hindú divide por nacimiento a la sociedad en cuatro grandes grupos, por orden de pureza: brahmanes (sacerdotes), shatriyas (guerreros), vaisyas (comerciantes) y sudras (sirvientes), que a su vez se subdividen en cientos de subcastas.
En lo más bajo de ese sistema están los descastados intocables, considerados impuros que realizan los trabajos más penosos, como la recogida manual de heces. Según el censo de 2011, en la India hay unos 200 millones de dalits, el 16,6 % de la población.
En una India rural dominada por el sistema de castas hindú, donde los más altos en el escalafón mantienen a la fuerza su posición de poder, la violación de mujeres dalits persiste como uno de los modos de control y supremacía. Tan solo en el año 2021 se registraron en la India 3.889 violaciones de intocables, lo que supone una decena de abusos sexuales diarios, según los datos del Buró Nacional de Registro de Crímenes (NCRB).
Sin embargo, organizaciones como la Red de Defensores de los Derechos Humanos de los Dalit (DHRDN) advierten que esos números muestran solo la punta del iceberg, ya que muchas veces las presiones de las castas superiores o de la propia Policía impiden que la víctima denuncie la violación.