Esta es sin duda una campaña electoral atípica en Italia. Varios factores influyen: la estación en la que se celebra, el final de un tórrido verano, los problemas que tendrán que afrontarse, como una guerra en el corazón de Europa o una inflación desorbitada que amenaza al país y, sin duda, en un primer ministro saliente, Mario Draghi, que ha marcado la historia de la política del Italia para siempre. Pero, no solo eso, las peculiaridades de esta campaña atraviesan también otros aspectos como el mensaje que cada uno de los líderes quiere dar en las redes sociales, una herramienta que la política italiana conoce bien -desde la llamada “bestia” que convirtió a Salvini en el partido más votado de Italia en las europeas de 2019, gracias al propio éxito en redes, a la política organizativa a través de las redes del M5S-. El tiempo es ajustado antes de llegar al voto este próximo 25 de septiembre y eso hace que el mensaje no solo se simplifique, sino que encuentre vías rápidas para ser difundido, y esos caminos cortos y masivos son la televisión y la radio indudablemente pero, ahora más que nunca, también las redes.
En cuanto se supo que Italia iría a votar, tras la caída de la coalición que sostenía a Mario Draghi el pasado mes de julio, el primero en salir fue Salvini con una foto que apelaba a uno de sus temas estrellas, el de la inmigración, en que expresaba que volvería a la carga con la intención de aprobar otro de sus “decretos seguridad”, que tienen como objetivo bloquear los puertos italianos. Aquella publicación era el punto de partida de un debate público donde los post en las redes marcan casi el ritmo de la campaña y donde hasta ahora se caracterizaban por ser una herramienta para transmitir el mensaje político, en este momento son también una arena de debate entre partidos. Primero servía para transmitir su comunicación, pero ahora permite iniciar un diálogo. El tercer paso, ya es así en el caso de algunos líderes, es que el debate con el electorado esté también dentro de las redes.
De hecho, en las últimas semanas de pre campaña veraniega, mientras los italianos estaban de vacaciones, las redes sociales han sido la gran herramienta de comunicación, la más cercana, muchas veces basada en bromas, alusiones, acusaciones, ironías, ataques muchas veces dirigidos a las personas más que a sus ideas. Fueron especialmente destacables algunos post como el del líder de Acción, Carlo Calenda, del centro político que publicó un vídeo que le había dejado su mujer explicando cómo usar la lavadora. Criticado en gran medida por una publicación que muchos consideraban sexista es un ejemplo más de lo que llaman intimate-politics, la política de la intimidad. Matteo Salvini también realiza habitualmente post personales o Giorgia Meloni que publicó hace poco una foto abrazando a su hija. En otras ocasiones durante este inicio de lucha por el voto las redes han sido fruto de una fuerte polémica, como en el caso de la publicación de Giorgia Meloni en la que compartía el vídeo, oscurecido, de una mujer que había sufrido una violación por un hombre migrante. El debate no solo fue enorme en las redes, sino que se traspasó a la sociedad, a los medios de comunicación tradicionales e incluso a la justicia, que abrió una investigación.
¿Cómo es la popularidad en redes de los líderes italianos?
Durante este mes de agosto la tendencia en las redes sociales ha sido similar a la de los sondeos. Todo el mundo ve y sigue las publicaciones de Giorgia Meloni porque el peso de su liderazgo en las encuestas pre electorales desde hace meses ha hecho que marque en gran medida el debate. Entre los otros líderes, por ejemplo, Matteo Salvini de la Liga -el más seguido- y Giuseppe Conte del M5S, gozan de la gran “musculatura” en las redes que tuvieron en su momento, ambos reafirmaron su figura política en gran medida a través de su presencia en las redes, sus vídeos y sus muchas declaraciones. Además, en el caso del M5S, las redes han estado siempre presentes en la organización propia del partido. En el caso de Berlusconi su estrategia ha sido casi siempre lineal, aunque es un personaje mucho más arraigado a los medios de comunicación de masas su sola presencia genera crecimiento y debate. En el caso del centro izquierda, con Enrico Letta, la presencia en las redes es débil pero, en general, el partido, el PD, gana en Instagram con algunas publicaciones vinculadas al electorado más joven.
Davide Morisi, experto en opinión pública, valora esta tendencia en las redes. “Hasta ahora la campaña ha sido muy estratégica y muy poco vinculada a temas concretos”, dice. Un esquema que se repite también en el ámbito digital. “En el caso de Meloni la estrategia del debate es clara: introducir los debates tradicionales de su partido, como al seguridad o la familia, y dar también una imagen fiable a los poderes internacionales. Es una estrategia mixta”, explica. Un planteamiento que ha traspasado también a su campaña electoral, encabezada por la palabra ‘Pronti’ (preparados) y que ha llenado las ciudades de sus carteles, apelando a un electorado menos tecnológico, pero también ha realizado vídeos en varios idiomas con mucha acogida en las redes sociales.
Andrea Boscaro, asesor marketing político en The Vortex, analiza el papel que tendrán las redes sociales en esta campaña electoral. “En general es importante darse cuenta que no son solo un instrumento para transmitir el mensaje de nuestra política, sino una herramienta de organización del partido y de movilización de la comunidad, de los votantes. Lo segundo es que, en este caso, con un gran abstencionismo el voto de opinión tendrá un rol muy significativo. Es por eso que vemos alguna entrada de personajes públicos en la campaña electoral, como en el caso de Chiara Ferrragni, la influencer más importante de Italia, que hace solo unos días hablaba del tema del aborto y de la posible limitación de este derecho si Hermanos de Italia, de Giorgia Meloni, llegaba al poder”, explica. Una polémica que, llevada siempre al debate en redes, ha marcado enormemente la campaña en las últimas horas.
Boscaro habla de otro gran factor que ha entrado en juego en las últimas semanas: Tik Tok. La red social más vinculada a la gente joven, a la franja de edad de la adolescencia, tiene 15 millones de usuarios en Italia y, ahora, habla también de las elecciones. “No se puede comprar publicidad política en esta red social como establece su normativa. Pero hay un dato que es muy interesante: en los últimos 30 días las etiquetas más populares han sido con la palabra #elecciones. No solo los líderes de los partidos entran a contarse en esta red social, sino que el debate entre los usuarios es muy destacable”, explica. Al margen de esta nueva tendencia Twitter se sigue llevando la palma en el debate político en Italia, allí han sido los mayores intercambios en el debate en las últimas semanas y seguirán siéndolo como herramienta central en la campaña electoral.