El pasado 15 de agosto se cumplió un año de la caída de Kabul, consumándose así el regreso al poder de los talibanes. Tras este largo tiempo, los talibán han hecho de Afganistán un lugar inhóspito para vivir, sobre todo para las mujeres. Como es el caso de Elaha, una mujer afgana, que ha sido arrestada tras denunciar en un vídeo en redes sociales el abuso al que fue sometida por parte de un alto cargo funcionario talibán. Este la obligó a casarse con él y abusó de ella en varias ocasiones.
En el vídeo se puede observar a Elaha llorar mientras describía cómo el exportavoz del Ministerio del Interior talibán, Saeed Khosti, la golpeaba y abusaba de ella. Además, afirmaba que estaban hablando desde un apartamento en Kabul donde los talibanes la habían confinado después de que intentara escapar del país, y suplicaba que la rescataran. Así lo publica Debate.
"Estas pueden ser mis últimas palabras. Me matará, pero es mejor morir una vez que morir cada vez, decía la mujer. El pasado miércoles por la noche, un día después de que se publicara el vídeo, la Corte Suprema dirigida por los talibanes tuiteó que Elaha había sido arrestada por difamación bajo una orden del presidente del Tribunal Supremo, Abdul Kakeem Haqqani. Pero, no mencionaron que se haya sometido a juicio alguno, tanto solo dijeron que "pronto será sentenciada de acuerdo con la ley sharía". La sharía designa el código de conducta o ley religiosa del Islam.
No solo se ha retrocedido 20 años, sino siglos en su concepto de estado y sociedad. Lo saben bien las mujeres, expulsadas de nuevo de la vida pública, con el despojo de sus derechos sociales, y de su acceso a la educación secundaria y al trabajo.
Los talibanes han aplastado a los disidentes, con ejecuciones extrajudiciales, amordazado a la prensa y acogido, en contra de lo que prometieron en un principio, a terroristas de al Qaeda y el ISIS. La congelación de la ayuda internacional para la reconstrucción ha agravado la crisis económica y humanitaria de un país, donde la hambruna y la desnutrición afectan a millones de niños.