El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, ha asegurado que Rusia está convirtiendo la central nuclear de Zaporiyia en un "campo de batalla" con el objetivo de "intimidar a Ucrania y al conjunto de Europa con un potencial desastre atómico equiparable al de Chernóbil.
Zelenski, que ha hablado en un foro en Noruega de forma telemática, ha advertido de que Rusia ha visto en el control de la central una "oportunidad" para el "chantaje", término que el presidente ucraniano ha utilizado en reiteradas ocasiones para describir el control que las fuerzas rusas ejercen sobre la planta desde principios de marzo.
Para Zelenski, "no es normal" que todavía no se hayan adoptado sanciones contra el operador nuclear ruso, Rosatom, ni que tampoco se hayan buscado otras vías de presión a Moscú, como mayores restricciones para la concesión de visados, por ejemplo limitando la entrada en el espacio Schengen por razones turísticas.
"Estamos viendo que, por primera vez desde 1986, cuando ocurrió la tragedia de Chernóbil, tenemos que plantearnos seriamente la posibilidad de hacer frente a un desastre radioactivo que cada está más cerca", ha señalado.
Zelenski considera que Rusia tiene una estrategia más amplia para crear todo tipo de "crisis", también en el ámbito energético, y se ha hecho eco de las informaciones que apuntan a que estaría quemando gas cerca de la frontera de Finlandia, por valor de unos 10 millones de euros diarios.
"Rusia quiere que Europa no preste atención a la guerra y, con este objetivo, va a provocar un caos interno en Europa", ha señalado el mandatario ucraniano, que ha instado a los gobiernos del continente a seguir dando pasos para eliminar la dependencia de la energía rusa y ha ofrecido las reservas de Ucrania para garantizar la seguridad energética continental.