La polémica surgida en torno a la primera ministra de Finlandia, Sanna Marin, ha quedado zanjada tras el resultado negativo de la prueba de drogas a la que se sometió la semana pasada. Así lo ha comunicado a través de la página web del gobierno finlandés: "No se encontraron narcóticos en la prueba de drogas del primer ministro"
Sanna se realizó un test de drogas a partir de que se hiciese público un vídeo privado donde se ve a la política bailando en una fiesta privada junto a un grupo de amigos, algo que al parecer escandalizó a la oposición finlandesa que le pidió conocer si había tomado drogas.
La jugada de la oposición les ha salido mal ya que se creó un movimiento en las redes donde se puede ver a mujeres finlandesas bailar en solidaridad con Sanna, a la que se le ha podido ver como un ser humano normal, quien en su tiempo libre disfruta con amigos.