El escritor británico de origen indio Salman Rushdie, de 75 años de edad, se encuentra ya sin ventilador y ha podido hablar tras el apuñalamiento que recibió durante una presentación en el estado de Nueva York presuntamente por Hadi Matar, de 24 años.
Su agente, Andrew Wylie, habría confirmado la noticia a medios estadounidenses, después de que señalase que el escritor podría perder un ojo. Sin embargo, no se ha hecho pública está actualización. A pesar de ello, el presidente del Instituto Chautauqua, donde fue atacado Rushdie, ha compartido la noticia.
"¡Salman Rushdie sin ventilador y hablando! Continuamos con las oraciones de parte de todos los miembros del Instituto Chautauqua", ha escrito Michael Hill, presidente de dicha institución en su cuenta de Twitter. Asimismo, ha indicado que "ha comenzado el camino hacia la recuperación".
Sin embargo, Wylie ha pronosticado que a Rushdie le queda un "largo camino" para reestablecerse porque "las lesiones son graves, aunque su estado progrese en la dirección correcta", de acuerdo con un comunicado recogido por Sky News.
El escritor permanece ingresado en un hospital de Pensilvania con al menos 12 heridas de arma blancas confirmadas en rostro, cuello, hígado, tórax y abdomen.
El hombre acusado de apuñalarlo, Hadi Matar, se declaró inocente horas antes durante la jornada del sábado de los cargos de intento de asesinato y agresión.
Un abogado de Hadi Matar, de 24 años, se declaró culpable en su nombre durante una audiencia formal en un tribunal en el oeste de Nueva York.
Tras saltar la noticia del ataque, Casa Blanca calificaba el accidente como un "atentado", a la vez que aplaudía la labor de los servicios de emergencia y los ciudadanos presentes durante el ataque.
"Este acto de violencia es espantoso. Todos nosotros en la Administración Biden-Harris estamos orando por su pronta recuperación", ha expresado en un comunicado.
El escritor británico de origen indio llevaba media vida amenazado de muerte por su libro ‘Los versos satánicos’. Desde que escribió la novela en 1989, el régimen iraní lo condenó y lo persiguió. Millones de musulmanes lo han considerado, desde entonces, un enemigo a batir.
En sus 75 años de vida, lleva treinta y tres de ellos bajo la amenaza del estado iraní. En 1989, en medio de disturbios y protestas que quemaban el libro y la figura del escritor, se ordenaba matar no solo a Rushdie sino a todo aquel involucrado en su novela. Ya entonces fueron apuñaladas tres personas: una de ellas, su traductor japonés, falleció.
Los versos de la polémica hacen referencia a una supuesta "inspiración satánica" que el profeta islámico habría confundido con una revelación divina. Pero Rushdie, considerado blasfemo por millones de musulmanes desde entonces, aseguró que él fue solo el pretexto para lanzar una guerra cultural y religiosa contra Occidente.