Edward LeClair era un pedófilo de 57 años que ha muerto en extrañas circunstancias el mismo día en el que se le declaró culpable por haber violado a un niño. Según han informado los medios internacionales como el periódico 'Daily Mail', el hombre murió en su celda tras beber una botella de agua justo después de producirse el juicio por un caso de pedofilia.
Al parecer, todo sucedió el pasado jueves 11 de agosto cuando Edward LeClair acudió al tribunal del Distrito 16 situado en Denton, Texas. Allí, el acusado se enfrentaba junto a su abogado al juicio por un caso de pedofilia que ocurrió en 2016.
Una vez celebrado el litigio, el juez encargado del caso leyó el veredicto ante los presentes. Al escuchar que había sido declarado culpable, el hombre de 57 años comenzó a beber de la botella de agua que llevaba consigo. "Agarró su botella y tragó el líquido mientras lo declaraban culpable de los cargos", apunta el medio de comunicación británico.
Justo después, los policías que se encontraban en la sala esposaron al culpable de un delito de pedofilia y lo trasladaron hasta su celda en la cárcel de Denton.
Sin embargo los agentes decidieron vigilarle debido al extraño comportamiento con el que estaba actuando. Al poco de ingresar en la celda, Edward LeClair empezó a vomitar.
Por eso, los agentes de seguridad decidieron llamar a los servicios de emergencia. "Lo encontraron inconsciente, los testigos dicen que estaba gris. Le llevaron hasta el Hospital Medical City Denton. Allí fue declarado muerto", ha comentado el abogado del pedófilo a los medios de comunicación estadounidenses.
Ahora, el cadáver del acusado de pedofilia se encuentra a la espera de realizarle la autopsia en el Tarrant. Por otro lado, varios Policías investigan qué le produjo la agónica muerte y han recogido la botella de agua de la que bebió para analizarla y usarla de prueba si fuese preciso.