La muerte del pequeño Archie ha sumido a Reino Unido en una enorme conmoción y ha abierto dos debates, uno sobre controlar el acceso a peligrosos retos virales y otro sobre la legitimidad de los tribunales para decir sobre estas cuestiones.
Los padres del menor llevaban meses tratando de lograr que su hijo no fuese desconectado del soporte vital pese a la decisión de los médicos, algo que finalmente no consiguieron.
Tras la muerte de Archie, Hollie Dance y Paul Battersbee han asegurado haberse sentido arrinconados por el sistema y han iniciado una campaña para intentar cambiarlo.
Los padres quieren que, en estas situaciones tan extremas, los progenitores puedan tener más voz para decidir sobre la vida del menor.
Centenares de ciudadanos han querido mostrar su apoyo a los padres del menor. Las puertas del Royal London Hospital se han llenado de flores y velas en recuerdo por el pequeño, y también de mensajes de apoyo para los padres de Archie. Muchos han querido intentar dar fuerza a los padres del niño tras la dura batalla judicial que llevan meses librando y que finalmente no han logrado ganar.
La madre de Archie, que acusó al hospital de una "ejecución coreografiada", asegura que aún así se siente orgullosa de haberlo intentado: "Sé que hice todo lo que pude. Todo."
La mujer ha asegurado que el menor era "un niño tan hermoso y luchó hasta el final, y estoy muy orgullosa de ser su madre".
Además, también ha querido reflexionar sobre su papel como madre, asegurando que cree que dio una buena infancia a su hijo: "Sé que he hecho un muy buen trabajo siendo la madre de Archie. Basándome en mi propia infancia, estaba muy decidida a ser la mejor madre posible y siento que lo he hecho lo mejor que he podido. Es una de las razones por las que estoy aquí", defiende.
Las redes están llenas de vídeos de jóvenes cumpliendo retos virales muy peligrosos, como el que le ha costado la vida a Archie. En Internet podemos ver retos de todo tipo: desde ingerir sustancias peligrosas, a golpearse con objetos o agredir a desconocidos.
Los psicólogos explican que los jóvenes tratan así de obtener reconocimiento social, pero arriesgan su vida y la de los demás con estos absurdos desafíos.
Ante esta situación, los expertos recomiendan estar atentos al uso de las redes, aunque prohibir no es el camino, como aclara Silvia Álava, doctora en Psicología: “Basta que lo prohíban, ¿para qué? Para que se haga muchísimo más atractivo. Por tanto, será más interesante sentarnos con ellos: ‘A ti este reto qué es lo que te aporta. Realmente, ¿no podrías conseguir sentirte parte del grupo haciendo otro tipo de cosas?’”, informa.