La localidad de Mikolaiv, al sur de Ucrania ha sido hoy objetivo de los ataques rusos. Dos misiles han impactado contra cuatro edificios civiles causando la muerte de dos personas e hiriendo otras veinte.
El ataque ha sido captado por cámaras de seguridad en las que puede verse el vuelo de las armas rusa y su posterior impacto contra las viviendas originando fuertes columnas de fuego y humo.
Mientras tanto, los combates en la región del Dombas siguen sin pausa. La resistencia está a la espera más armas y municiones para repeler los avances de las tropas rusas.
En ciudades como Lisichansk, los civiles se llevan lo pero de la guerra. Muchos edificios son abatidos por la artillería rusa y son los vecinos, con la ayuda de los soldados ucranianos los que tienen que buscar y rescatar a los posible supervivientes entre los escombros.
Moscú planea la estocada final a la vecina Severodonestk, pero Ucrania no se rinde. Mezclados con soldados regulares ucranianos, los combatientes extranjeros toman posiciones para controlar cada palmo de terreno y asegurar los edificios mientras las ráfagas de disparos rusos silban cerca de sus cabezas. La ofensiva rusa reduce a cascotes aldeas y ciudades enteras como Irpín.