Flora Inez, una niña húngara de cuatro años, ha muerto tras pasar tres días en el hospital. El conductor del autobús escolar se olvidó de ella y la niña pasó más de siete horas encerrada en un día de calor asfixiante.
Los padres de la niña la dejaron en el autobús escolar que debía dejarla en clase. Sin embargo, por razones que se desconocen, el conductor olvidó a Flora Inez, de Tomajmonostora, Hungría, dentro.
Ese día hacía un calor sofocante y la niña de cuatro años sufrió un golpe de calor. Estuvo siete horas, hasta que fue encontrada al final de la jornada escolar, encerrada en el autobús a temperaturas de 50 grados.
Los servicios de emergencia la encontraron con vida pero inconsciente. Fue trasladada en helicóptero al hospital ya “en una condición potencialmente mortal”, según declaraciones de los servicios médicos.
Flora Inez lucho por sobrevivir pero después de tres días en cuidados intensivos falleció.
La pediatra Orsolya Acs ha explicado al diario Bors que “lo más probable es que el cuerpo se calentara tanto que se secó porque sudó y exhalo toda el agua de su cuerpo”. “Ella no pudo corregir la temperatura de su cuerpo”.
El conductor del autobús escolar, de 56 años, está recibiendo tratamiento psicológico. La policía húngara mantiene abierta una investigación.