Un hombre ha muerto en Brasil a manos de su jefe. El supervisor le llamó la atención a un empleado por tomar café fuera del horario permitido y se enzarzaron en una discusión. El jefe acabó apuñalándolo.
Fueron dos puñaladas mortales en el pecho. Quienes conocían a jefe y empleado cuentan que ambos habían discutido en otras ocasiones pero sin llegar nunca a ser violento.
Sin embargo, esta vez ambos discutieron porque el trabajador, de 36 años, había hecho una pausa para tomar café fuera del horario permitido. Ambos discutieron en una de las oficinas, donde no había cámaras, cuenta Semana. Nadie sabe cómo se desarrollaron los hechos. Solo que discutían por la pausa del café.
En las cámaras de seguridad si se ve como el empleado sale de la oficina con las manos en el pecho, muy débil. Mientras el resto de empleados se acerca a auxiliarlo, el supervisor huye.
El trabajador murió en el hospital. Una de las dos puñaladas en el pecho le había alcanzado el corazón, según Semana.
El supervisor ya se había enfrentado con otros empleados anteriormente. De hecho había sido denunciado por algunos de estos problemas con los trabajadores. Por el momento, sigue huido.