La policía del condado de León, en Estados Unidos, ha anunciado la muerte de un preso recientemente fugado, al que vincula con el asesinato de cinco personas durante su fuga. El suceso ocurrió el pasado jueves 2 de junio en el estado de Texas.
Ha sido la propia página oficial de Facebook de la Policía de León la que ha comunicado la muerte del reo. Al parecer y según han comunicado los agentes en las redes sociales, el reo fue identificado como Gonzalo Artemio López, fue "capturado y está muerto".
El Departamento de Justicia Penal de Texas aseguró, por su parte, que López murió por los disparos de agentes en la localidad texana de Jourdanton, en un tiroteo en el que ningún policía resultó herido.
Anteriormente, las autoridades habían informado del hallazgo de cinco cadáveres (un adulto y cuatro niños) en una casa ubicada dentro del área en la que se buscaba el recluso fugado, en la zona de Centerville. Según la Policía, el sospechoso empleó el vehículo que se encontraba en la vivienda para continuar su huida.
El responsable del Departamento de Justicia Penal de Texas Jason Clark aseguró a los medios que la casa era la segunda vivienda de una familia de la localidad de Houston y que había sido chequeada en varias ocasiones. En concreto, los cadáveres hallados eran los de un abuelo y sus cuatro nietos que tenían entre 11 y 18 años.
Según el responsable del Departamento de Justicia Penal de Texas, el preso irrumpió en la vivienda y mató a la familia que fue encontrada sin vida a las pocas horas, aunque no ofreció ningún detalle.
López, por cuya captura se ofrecía una recompensa de 50.000 dólares, se escapó el pasado día 12 cuando era trasladado en un autobús de la cárcel a un centro médico. Al parecer, el preso apuñaló al conductor del autobús que le trasladaba hasta el centro médico y procedió su huida.