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La estancia del príncipe Andrés en Royal Lodge podría llegar de una vez por todas a su fin. La mansión, situada al sur del Castillo de Windsor, ha albergado a varios miembros de la Familia Real, incluyendo a la difunta reina Isabel II y la reina madre.
Desde 2004, el hermano pequeño del rey Carlos III se ha refugiado en la residencia, acompañado durante la mayoría del tiempo por su exmujer, Sarah Ferguson. Sin embargo, desde que se le acusara de haber abusado sexualmente de una joven y se viera involucrado en la trama de Jeffrey Epstein, el príncipe fue apartado de la agenda real y despojado de sus títulos reales y militares.
La intención de la reina Isabel II era alejar al polémico príncipe Andrés de Buckingham y que su figura se desdibujara, quedando así en un segundo plano y cada vez más alejado de la Familia Real. Ese objetivo lo heredó el rey Carlos III, y ahora ha tomado una decisión clave sobre el futuro de Andrés para forzarle a desalojar el que ha sido su hogar durante dos décadas.
La lucha silenciada entre hermanos por este territorio comenzó a principios de 2023. El monarca obligó a su hijo, el príncipe Harry, y a su mujer, Meghan Markle, a abandonar Frogmore Cottage, residencia real de los duques de Sussex. La intención del soberano era que su hermano pequeño se mudara allí, liberando por fin Royal Lodge.
Ante la negativa de Andrés, el rey se ha visto en la obligación de tomar cartas en el asunto. El soberano ha ordenado la retirada del equipo de seguridad privada de diez hombres que había estado protegiendo al hijo de Isabel II desde que se le retiró la protección policial en 2022 por su vinculación con Jeffrey Epstein.
Así lo han confirmado fuentes cercanas al palacio a The Sun. Esta medida podría significar que el rey está decidido a forzar a Andrés a abandonar Royal Lodge.
El rey ha estado financiando la seguridad de su hermano desde hace dos años. Un desembolso económico que llegará a su fin el próximo mes de octubre. Así, el príncipe Andrés cuenta con un plazo menor de dos meses tras el que deberá hacer frente a su protección y seguridad por sí mismo.
"Todo el mundo especula que esto significa que el duque tendrá que abandonar Royal Lodge porque, ¿qué otra razón podría haber para quitarle su seguridad?", ha destacado una fuente cercana al citado medio. "No es un secreto que el rey quiere que se vaya", ha añadido.
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