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Un menor ha sido condenado por agredir a su expareja, a la que amenazó poniéndole un cuchillo en el cuello. El agresor tendrá que cumplir 12 meses de libertad vigilada y de alejamiento de su expareja, según la sentencia de la Audiencia Provincial de Pontevedra.
El maltrador además tendrá una orden de alejamiento de su expareja y la obligación de realizar un programa de prevención de violencia de género.
La sentencia, además incluye una indemnización a la víctima con 107 euros por las lesiones que le provocó y otros 959 euros por romperle el teléfono móvil que rompió; también deberá pagar al Servicio Sanitario gallego (Sergas) 395 euros por los gastos ocasionados, según ha informado el Diario de Pontevedra.
La agresión ocurrió en febrero de 2023, cuando los jóvenes, que habían mantenido una relación sentimental en pasado, se reencontraron en una discoteca y se fueron a dormir juntos a la casa del padre de la chica.
Las cosas no fueron bien, porque el joven comenzó a reprocharle que esta hubiera quedado con otros chicos. La violencia hacia la joven fue en aumento y le quitó el móvil y lo tiró al suelo, rompiéndolo al tiempo que empezó "a dar puñetazos, agarrándola del pelo y tirándola al suelo, donde siguió propinándole golpes", según recoge la sentencia.
La víctima, a la mañana siguiente, le pidió el móvil pero el condenado, que no quería que contara lo sucedido, "le puso un cuchillo en el cuello" y le argumentó que la actitud de la chica le tocaba "los cojones, entonces te tengo que dar unas hostias".
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