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El conductor de un coche fúnebre que trasladaba un féretro con un cadáver en su interior en Pontevedra, tuvo que actuar con rapidez al verse sorprendido por las llamas que salían del motor del vehículo.
Cuentan los medios gallegos que el conductor detectó que algo iba mal al ver que salía “bastante humo del motor”, por lo que buscó rápidamente un lugar en el que aparcar, estacionando el vehículo en la calle Conde Bugallal de Pontevedra.
Allí pudo evitar que el féretro se incinerase al conseguir sacarlo a tiempo, pero no así el coche que lo portaba, que quedó totalmente calcinado, igual que otro vehículo estacionado al lado, que también ardió por completo.
“Ya me pasó una vez que lo intentamos apagar”, explica el conductor acerca del humo que desprendía el motor, a lo que añade que “en segundos esto empezó a arder y no nos dio tiempo ni a coger extintores”, explica.
El toque de humor negro a la noticia, publicada en la red social X, lo pone un testigo entrevistado por la Televisión Pública de Galicia, quien apunta que “por los pelos no hacen una cremación involuntaria”, comenta con retranca.
Los hechos tuvieron lugar este miércoles al mediodía y no hubo que lamentar daños personales.
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