Unos sesenta funcionarios, entre bomberos, policías locales y trabajadores de otros servicios municipales, se han encerrado en la mañana de este jueves en el interior del consistorio de Ourense para protestar por la situación que llevan meses viviendo “respecto al cobro de sus salarios y a sus condiciones”.
Así lo asegura el diario La Región, que indica que es una protesta que se añade a la “lista de manifestaciones producidas en las últimas semanas frente al edificio” como muestra de su malestar con los impagos de sus nóminas.
Según la cabecera local, los trabajadores “no han recibido los pluses de nocturnidad y festividad en sus nóminas de marzo y abril, y también han dejado de percibir el incremento del 0,5% pendiente de aplicación".
Esta situación se da “como consecuencia de la medida del alcalde Pérez Jácome de tumbar el capítulo I de los presupuestos en vigor (prorrogados desde 2020), y retrotraerlos a los del año 2014”, explica el medio local, lo que provoca que se aminoren los créditos, siendo así “insuficientes para pagar pluses y otros conceptos” que reclaman los funcionarios.
Asegura La Región que el crédito presupuestario disponible se ha rebajado por este motivo en casi un millón de euros.
El alcalde de Ourense, que a su entrada en el edificio se encontró con los manifestantes, reunió a sus asesores con el colectivo y con el jefe de Recursos Humanos, José Manuel Oliver.
En las explicaciones, reza la cabecera que se habló de que las nóminas de abril ya están confeccionadas y “no hay vuelta atrás”, pero que “intentarán que se puedan recuperar los pluses en mayo.
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